En un comunicado, el presidente de Fecoreva, José Pascual, se mostró "disgustado" por los términos del acuerdo que regirá las relaciones comerciales en materia agrícola entre la UE y Marruecos durante los próximos cinco años, puesto que, en su opinión, "claramente perjudica a España en general y a la Comunitat Valenciana en particular".

En materia de cítricos, el acuerdo elimina los contingentes y reduce un 30 por ciento los precios de entrada, salvo para la clementina importada de noviembre a febrero, cuyo tonelaje máximo también se amplía en 50.000 toneladas. De este modo, según Pascual, "en la práctica representa la libre entrada y circulación de productos citrícolas marroquíes, cuando España tiene limitado el cupo de exportación de naranjas".

Este aspecto es criticado por los citricultores valencianos, que consideran que "no se hallan en igualdad de condiciones con respecto a sus homólogos marroquíes, ya que sus costes de producción son muy inferiores a los nacionales".

Pascual indicó que este hecho se debe a que "sus salarios son diez veces inferiores a los españoles y no incluyen, además, derechos sociales", al tiempo que "utilizan pesticidas que en España no están permitidos y que son mucho más baratos que los que pueden emplear nuestros agricultores".

El presidente de Fecoreva hizo hincapié en que, por todo lo anterior, este acuerdo "constituye una competencia desleal que no se debería tolerar y mucho menos favorecer desde la UE".

Por ello, Fecoreva reclama que "tanto desde Bruselas, como desde el Gobierno de España, se tomen las oportunas medidas para que el Acuerdo con Marruecos sea revisado" y se aplique finalmente "en unos términos que no representen un agravio para los productores de cítricos de la Comunitat".