Sólo en los cruces con la Gran Vía y Vía Parque.

Consistirá en el soterramiento de sólo aquellos tramos que conecten la carretera con la Gran Vía y la futura Vía Parque, junto con la delimitación final de seis carriles en los tramos que queden a cielo abierto.

Sin embargo, los espacios soterrados contarán con sólo cuatro carriles, porque según el alcalde de Alicante, Luis Díaz Alperi, «no hay espacio para más». A la altura del complejo Vistahermosa, la avenida de Dénia verá ralentizado su tráfico, «la circulación será urbana y así los coches no podrán ir a gran velocidad», indicó el primer edil. La reforma de la antigua carretera a Valencia conllevará que desaparezcan instalaciones del Bulevar del Pla y la Gran Vía «porque se ampliarán las calzadas», según Alperi.

Fomento no paga la obra

El alcalde de Alicante comentó que la explotación de la obra correrá a cargo de la Generalitat Valenciana y el Ayuntamiento alicantino aportará sus pequeñas modificaciones, después de que el Ministerio de Fomento la rechazara por considerarla vía urbana.

Vistahermosa no se verá afectada

Luis Díaz Alperi argumentó que a la altura del complejo residencial Vistahermosa «la avenida de Dénia no se soterrará porque no hay espacio para ello y plantearía muchos problemas, según los técnicos. Además, la vía de servicio que tienen los vecinos tendría que usarse para el soterramiento y a ellos no les interesa en absoluto». El primer edil también añadió que «además esta obra eliminaría aparcamientos del complejo y los residentes tendrían tráfico en la misma fachada de sus casas».