El Principado confirmó ayer que el proyecto de presupuestos regionales para 2010 suprime el cheque-bebé, la ayuda de 500 euros que complementaba los 2.500 aportados por el Estado por cada nacimiento o adopción, y condiciona la continuidad de las subvenciones a la compra de vehículos a la evolución de la situación económica.

Las cuentas públicas de 2010, que se elevan a 4.428 millones y registran un crecimiento del 0,77%, se aprobaron ayer por el Consejo de Gobierno y serán entregadas en la Junta General mañana para iniciar su tramitación parlamentaria. Teniendo en cuenta que el cheque -bebé llega a unas 7.000 familias y la difícil situación que atraviesa Asturias en términos demográficos –la región, con menos de 1,1 nacimientos por mujer, dista mucho de los 2,1 niños por mujer que se precisan para asegurar el recambio generacional– el PP reclamó ayer el mantenimiento de esta ayuda y exigió un plan que favorezca el crecimiento demográfico de la región

El presidente de los populares en Asturias, Ovidio Sánchez, aseguró que está dispuesto a presentar su propio plan, que incluirá ayudas a las familias, medidas que favorezcan el retorno de jóvenes emigrantes y para la atracción de la emigración o políticas de fomento de empleo.

Y subrayó que Asturias «es la única región que no ha aumentado su población ». De hecho, inidicó que mientras la población del país ha crecido en 5 millones de habitantes en los últimos diez años, en Asturias se ha perdido población.