Que los vascos tenemos fama de buenos comedores no es nada nuevo. Aunque, pese a la nueva cocina vasca y a la innovación entre fogones, las alimentación de los vascos viene a ser bastante básica, es decir, tiene como fundamento los alimentos de toda la vida: huevos, leche, pan, fruta fresca, carne, pescado...

Porque, si destacamos por algo a la hora de la ingesta, es porque no ponemos las botas con estos alimentos. Vamos, que superamos ampliamente la media del Estado en el consumo de todos estos alimentos.

Ahí van los datos. Un vasco se mete entre pecho y espalda cada año la friolera de 167 huevos, 49,4 kilos de carne, 30,5 kilos de pescado, 94 litros de leche, 50,6 kilos de pan... cuando el consumo medio español es muy inferior.

En concreto, comemos 40 huevos más (un 28% más); 4 kilos de pescado (17,4%); 4 kilos de carne más (9%);8 kilos de frutas más (16,4%), etc., etc.

Son datos del Ministerio de Medio Ambiente Rural y Marino, que ha estudiado los hábitos de alimentación y el gasto que representa. Claro, aquí también es superior a la media. Los vascos nos dejamos cada año en las tiendas de alimentación y supermercados un media de 1.613,9 euros por cabeza, un 9,7% más que la media.

La lectura podría ser positiva en algunos casos, pero  no puede ser más negativa en otros. Por ejemplo, comemos pocas verduras, un 7% menos que la media, menos patatas, un 21% menos, y , claramente, nos gustan demasiado la bollería y los chocolates.

El consumo en Euskadi de estos productos es un 24,2% superior a la media de las comunidades autónomas.. Quizás sea lo que nos quitamos en otros productos que también engordan: pasta, arroz, cerveza, bebidas gaseosas, batidos, platos preparados... De todo ello comemos bastante menos que la media.

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