«Cuando acabe el año habrá 2.000 empleos temporales menos en la empresa del rombo, por lo que es fácil calcular las consecuencias en el resto del sector», aseguró el secretario general de Minerometalurgia de Castilla y León, Pedro Monasterio.

Negociar para el futuro

El nuevo descenso de producción en Renault Valladolid –el pasado año fabricaba 1.300 y a partir del lunes sólo 560– puede ser la causa de que en los próximos días mucha empresas anuncien medidas para ajustar las plantillas.

Ante esta situación, Comisiones Obreras recomendó ayer a sus delegados una serie de criterios para abordar las posibles negociaciones. El principal objetivo será exigir la inclusión, en los expedientes de regulación temporal y en los expedientes de extinción de empleo, de cláusulas que garanticen la reincorporación de los trabajadores a sus puestos de trabajo una vez que se supere la crisis que atraviesa el sector de la automoción, informa Europa Press.

Innovación e investigación

Desde Comisiones también apuntaron posibles soluciones para la crisis que vive el sector de la automoción en España e indicaron que se trata de diversificar la industria y potenciar la inversión en I+D+I.

«Es difícil competir con un modelo basado en los bajos costes», explicaron estos representantes, antes de recordar que las fábricas se encuentran entre las mejores de Europa, tanto en capacidad como en cualificación profesional.

Prevenir para no tener que curar

No es la primera vez que se solicita, pero de momento Castilla y León carece de un observatorio de la automoción en Castilla y León. Este instrumento permitiría, según Comisiones Obreras, «estudiar la evolución y las tendencias del  sector, para anticiparse a los posibles problemas». Otra de las soluciones para el sector pasaría por aumentar la competitividad de las factorías  españolas, y eso se conseguiría con la fabricación de vehículos de gama alta y no de los del segmento pequeño. Comisiones quiere que se cuente con los sindicatos para decidir qué vehículos se producen.