Una patrulla del Cuerpo Nacional de Policía desalojó del Hospital General Yagüe de Burgos a dos alborotadores y les trasladó a Comisaría para dar cuenta a la autoridad judicial de los desórdenes públicos protagonizados por ambos sujetos, según informaron hoy fuentes de la Subdelegación del Gobierno.

Los vigilantes del Servicio de Seguridad del Hospital General Yagüe avisaron a la Policía para desalojar a dos individuos que estaban organizando un escándalo y metiéndose con el personal sanitario. Uno de ellos, usuario habitual del Hospital, estaba ingresado en una habitación, acompañado de su amigo.

Ya por la noche habían provocado las quejas de otros usuarios por las molestias que originaban, dando voces y fumando en la habitación. El día anterior, el “enfermo” se había ido por su cuenta sin el alta médica y por la noche regresó con su amigo. Cuando le dieron el alta médica, se negó a irse hasta después de comer.

Ambos insultaron y amenazaron al médico que les recriminó su actitud, quien tuvo que dar aviso al servicio de seguridad para evitar ser agredida. Con la presencia de los vigilantes tampoco se consiguió que cesaran en su actitud.