La oferta, como siempre, es la que manda. Y en la comarca de Vigo, los diez trabajos que más proliferan en el tablón de anuncios son los de peón, administrativo, albañil, camarero, dependiente, mozo de limpieza y almacén, tubero industrial y peón de obras públicas.

Los hombres, que representan el 47,7% de la población de Vigo elige, por este orden, ser operario industrial, administrativo, camarero, peón de la construcción, dependiente, carpintero, mozo de almacén o conductor de furgoneta de reparto.

Ellas, o sea, el 52,3% restante, optan por convertirse en dependientas de comercio, administrativas, limpiadoras, operarias industriales, auxiliares de clínica, camareras, cuidadoras a sueldo de guarderías infantiles, cocineras o peluqueras, eso sí, de señoras. Y además lo hacen con más empeño: protagonizan el 62% de las demandas de empleo.

El 22,4% trabaja en casa

Pero la desigualdad de género no acaba ahí. Según el IGE, la tasa de inactividad femenina (54,5%) es superior a la masculina (33,6%), y no porque esas casi 70.000 mujeres rechacen incorporarse al mercado de trabajo, sino porque, al menos el 41%, tienen suficiente en casa. Una de cada cuatro viguesas, el 22,4%, se dedica aún a las llamadas tareas del hogar.

Área de Igualdad en el Concello

Vigo será pionero, según la concejala Lucía Molares, en la puesta en marcha de un departamento municipal dedicado en exclusiva a las políticas de igualdad. Ésta es una de las medidas incluidas en el tercer plan de igualdad que ayer aprobó la junta de Gobierno local para trabajar en cuatro ámbitos: la familia y la escuela, la corresponsabilidad doméstica, la calidad de vida y el trabajo. También se crearán un Observatorio de Igualdad y una plaza específica de funcionario.