Una exposición con más de 250 piezas de arte medieval reúne en Murcia hasta enero de 2010 el universo científico, legislativo, político, cultural y de ocio del siglo XIII durante la época del reinado de Alfonso X El Sabio, con sus cuatro Cantigas de Santa María juntas por primera vez para el público.
Procedentes de instituciones de España, Francia, Reino Unido e Italia, están casi todas las obras que salieron del scriptorium alfonsí, salvo tres de ellas, que no han podido ser prestadas por el Vaticano y Patrimonio Nacional por razones de conservación, ha explicado el comisario de la muestra, el medievalista Isidro Bango, catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid.
Organizada por Caja Mediterráneo, el Gobierno y el Ayuntamiento de Murcia, contiene secciones de orfebrería, con joyas únicas como los relicarios de las Tablas Alfonsíes y del Santo Sepulcro, o la Virgen Abridera de Allariz (Orense), una colección de telas y doce códices sobre astronomía y astromagia, entre los que destacan el Libro del saber de astronomía, Lapidario y Astronomía y cómputo, una de las maravillas de la miniatura carolingia.
Juego y justicia
La sección dedicada al juego cuenta con la colección más completa de piezas de ajedrez y tableros de España y con otros entretenimientos medievales, como el manqala califal, mientras que en el apartado de leyes se muestra la primera de Las siete Partidas, procedente de la Librería Británica londinense.
Según Bango, éste es el primer código de justicia moderno, que tardó más de un siglo en poder entrar en vigor por la resistencia que opusieron para ello los estamentos de la nobleza y la Iglesia, que veían cómo con él perdían sus privilegios ante la ley.
Cantigas de Santa María
Respecto a las Cantigas de Santa María, que se conservan en las bibliotecas nacionales de Florencia y Madrid y en el monasterio de El Escorial, Bango ha señalado que son el repertorio musical más importante de Europa sobre lírica y folclore medieval, además del más rico cancionero mariano de todo el medievo, con 420 poemas escritos en galaico-portugués, con notación musical e ilustraciones.
Otra de las secciones de la exposición se dedica a la relación de Alfonso X con Murcia, reino que le fue fiel hasta el final de sus días, por lo que el rey quiso que su corazón se trasladara hasta la ciudad, en cuya catedral se conserva.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios