El director de cine Roman Polanski, detenido desde hace dos semanas en Suiza por una causa pendiente con la justicia, se encuentra "muy deprimido", según ha declarado este domingo su abogado, Hervé Temime.

Polanski, de 76 años, fue arrestado el 26 de septiembre a su llegada al Festival de Cine de Zúrich en cumplimiento de una orden detención estadounidense que pesaba sobre él. Desde entonces, se encuentra detenido a la espera de la extradición. Por el momento, la solicitud de extradición realizada por EE UU está pendiente de resolución.

Para su abogado es importante que el director pueda salir de la cárcel cuanto antes. "Cumpliría todas las condiciones y se quedaría en Suiza hasta que se decidiese sobre su extradicción", dijo Hervé, quien a su vez ha remachado que su defendido "se encuentra en un estado de ánimo preocupante".

Los abogados han presentado una solicitud de puesta en libertad bajo fianza que ha sido aceptada por la justicia. Según las autoridades suizas, EE UU aún no ha presentado una petición formal de extradicción de Polanski. El Ministerio de Justicia suizo considera que no es seguro otorgarle la libertad bajo fianza ya que, según un portavoz, el riesgo de fuga es elevado.