Dos años y medio después del repentino fallecimiento de la 'Playmate' Anna Nicole Smith han aparecido unos documentos del FBI en los que se investigaba la posibilidad de que la joven hubiera contratado a un sicario para acabar con la vida del hijo de su difunto marido, un petrolero tejano de 89 años, J. Howard Marshall II.

Anna Nicole Smith, ex chica 'Playboy' saltó a la fama por casarse en 1995, con apenas 26 años, con el propietario de la empresa petrolera 'Great Nothern Oil Co.', J. Howard Marshall II, de 89 años.

Cuando enviudó, la estadounidense protagonizó una batalla legal con la familia del tejano por su herencia, y tras la muerte de la playmate siguieron las disputas -esta vez entre otro ex marido y un ex novio- por lograr la custodia del hijo y heredero de la modelo.

Sin embargo, durante los años 2000 y 2001, seis años después de su boda con Marshall, el FBI estuvo investigando a Smith por su presunta intención de acabar con la vida del hijo de su entonces marido. Durante esta investigación, en un interrogatorio a la chica 'Playboy', la rubia no llegó a confesar o confirmar estas intenciones pero sí rompió a llorar muy nerviosa.

"Smith comenzó a llorar y negó haber tenido nunca esos planes", indica el documento.

Según publica la revista alemana Bild.de, por aquel entonces no había suficientes pruebas para acusar a Anna Nicole de un complot de asesinato contra E. Pierce Marshall, quien intentó impedir que ella se hiciera con la fortuna de su difunto padre.

"Smith negó firmemente haber contemplado tal crimen", relata un agente, por lo que los fiscales decidieron aparcar el caso. En una carta al FBI fechada el 26 de abril del 2001, una fiscal federal adjunta, Sally Meloch, afirmó haber revisado los documentos determinando "que no hay suficiente evidencia para establecer un complot de la Sra. Smith para contratar un asesino que matara a Pierce Marshall".

Sin embargo, años después de la muerte de Anna Nicole, Mark Hatten, su ex novio,  desvelaba en una entrevista al portal TMZ.com que su por entonces pareja le había pedido "en repetidas ocasiones asesinar a E. Pierce Marshall, porque quería evitar que ella se quedara con su dinero".