El ingenio abre cualquier puerta. Lo sabe muy bien Andreu Buenafuente, un tipo que hace mucha gracia y entretiene sin necesidad de grandes artificios, pero con un guión cuidado hasta el milímetro. Casi 600.000 espectadores (7,8%) han llegado a esperarle hasta la medianoche para presenciar esa habilidad suya de convertir en fácil lo difícil.

¿Es Buenafuente tal y cómo le vemos en televisión?

Intento ser bastante real. Pero el Buenafuente de la televisión es una mezcla de muchas cosas: tiene mucho de Andreu, una pizca de cómico y un toque de un tío que se hace el tonto. Cuando digo algo que no me creo, se me nota en la cara, por eso siempre pido un guión acorde con mi carácter.

¿De dónde sacan las ideas?

Nos inspiramos en el periódico del día. Le damos a la vida la traducción a humor. Es lo que hace la gente continuamente, yo sólo lo digo en televisión, un poquito más pensado, porque tengo tiempo para escribirlo y trabajarlo.

¿El humor es bueno en tiempos de crisis?

Es curativo e higiénico. Llegar por la noche a casa y al encender la tele encontrar a unos tipos que están locos y se ríen de todo es muy sano. Lo peor es que yo no lo puedo ver. Acabas la temporada hecho polvo, pero somos unos privilegiados.

¿Cómo ve el panorama televisivo actual?

En general, el compromiso de los programas es bajo o nulo, por no hablar ya de la carga ética o moral. Quizá soy un poco tonto o romántico, pero todavía creo en una televisión en la que aportas algo que pueda mejorar la existente. Para mí esto es un arte, pero veo que para otros es un fast food y una reiteración que por cansina es irritante. No soporto más ver a Belén Esteban.

Un entrevistado que se le haya resistido...

Tengo una deuda pendiente para entrevistar a Fernando Alonso y Javier Bardem. Me queda tiempo para seguirlo intentando porque aunque tengo 44 años calculo que mi esperanza de vida está sobre los 80.

¿Y quién le ha dejado mejor sabor de boca?

Hay muchos. Pero Concha Velasco representa un poco al invitado ideal. Una persona muy querida pero al mismo tiempo moderna, muy artista y muy persona. Por lo menos la gente que viene a mi plató está bien de la cabeza y sabe estar, porque cuando veo otros programas me doy cuenta de que no me gustaría lidiar con esos invitados.

Esta temporada tiene a una chica nueva en su equipo...

Cuando vi a Ana Morgade me gustó, pero no la he fichado por su condición de mujer, sino por cómica, que es lo que busco siempre. Un programa de tan largo recorrido como el nuestro necesita renovaciones e incorporaciones.

¿Dónde ha puesto el listón esta temporada?

Quiero hacer un programa mejor que el del año pasado. Al final esto ya no es por ganar dinero, sino por mejorar tu propia carrera trayendo mejores invitados, buenos guionistas...

¿Sigue luchando por un horario más temprano?

He desistido porque es un desajuste que no puedo solucionar. Creo que la programación en España debería de ir un poquito antes, porque ya no somos un país trasnochador, la gente aquí se levanta a las siete de la mañana.

* 'Buenafuente', en La Sexta, de lunes a jueves, a las 00.00 h.