El pantano de Eiras ha caído cerca de cinco puntos en una semana y se sitúa ya al 48,9% de su capacidad. El de Zamáns, once veces más pequeño, ha resistido mejor la falta de precipitaciones y se mantiene al 52,6%.
La situación de los embalses ha rebasado ya la barrera simbólica del 50%, y no muestra síntomas de mejoría para los próximos días. Si se cumplen las previsiones del servicio meteorológico de la Xunta, no va a caer una sola gota de lluvia esta semana.
Medidas insuficientes
El llamamiento al consumo responsable y las primeras restricciones en el baldeo de calles y el riego de jardines, medidas que el Concello puso en marcha hace sólo ocho días, podrían resultar insuficientes si la sequía persiste.
Las reservas se reducen ahora a menos de 80 días, un dato aún más preocupante si se tiene en cuenta que otros municipios han pedido abastecimiento y que algunos, como Baiona, ya aplican restricciones.
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