Controvertidos y delicados. Los Presupuestos para el 2010 -los sextos de la era Zapatero- han sido aprobados por el Gobierno en Consejo de Ministros extraordinario -provocado por el viaje a la Asamblea General de la ONU del presidente del Ejecutivo y de la vicepresidenta segunda, Elena Salgado- celebrado este sábado en Madrid.

La vicepresidenta Primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha sido la primera en intervenir en rueda de prensa. De la Vega ha dicho que los Presupuestos para el próximo año son "austeros" debido a la "difícil coyuntura económica". Son "Presupuestos" para "la reactivación de una economía sostenible y la reactivación del empleo".

De la Vega ha calificado las nuevas cuentas generales de "realistas", "solidarias" y "equitativas". Al mismo tiempo, se ha referido a la reforma fiscal proyectada y largamente comentada, que también ha tachado de "equitativa y solidaria".

Gravar las rentas del capital

La vicepresidenta segunda, Elena Salgado, ha dicho que se trata de solicitar un esfuerzo de "solidaridad moderado" que contribuirá al equilibrio de las cuentas públicas y que por eso han incidido en las rentas del capital para hacer la reforma fiscal, una medida ya barajada por el Ejecutivo. La tributación, para este tipo de rentas, se eleva del 18% al 19% en los primeros seis mil euros. Y los que superen esta cifra, serán gravados un 21%.

Según explicó en una rueda de prensa Salgado, la modificación de esta tributación para quienes declaren hasta 6.000 euros, unos 11,5 millones de contribuyentes tendrán que tributar seis euros más al año de media.

En cuanto a las rentas de capital más altas, las superiores a 60.000 euros tributarán una media de 5.000 euros más al año, y las de más de millón de euros pagarán una media de 30.000 euros más al año, dijo Salgado. Por contra, la bajada del Impuesto sobre Sociedades en cinco puntos para las pymes y autónomos restará 700 millones a la recaudación.

Además de esta medida se suprime la deducción de los 400 euros en el IRPF y subirá el IVA reducido un punto, hasta el 8%, mientras que el general lo hará en dos puntos, hasta el 18%. El IVA para los productos de primera necesidad no se incrementará.

¿Cuánto quiere recaudar el Gobierno?

Éstas son las principales medidas fiscales incluidas en el proyecto de ley de los Presupuestos Generales del Estado y por ellas el Estado espera conseguir ingresar 10.950 millones de euros el año que viene.

La modificación del IVA provocará una recaudación adicional de 5.150 millones de euros. La deducción de los 400 euros, alrededor de 5.700 millones de euros. En cuanto a la recaudación de las rentas del ahorro (capital), permitirán recaudar 800 millones de euros más.

Por contra, la bajada del impuesto sobre sociedades en cinco puntos para las pymes y autónomos que mantengan el empleo restará 700 millones a la recaudación.

¿Y el impuesto verde?

La vicepresidenta segunda del Gobierno, Elena Salgado subrayó, sobre la posibilidad de instaurar la denominada 'fiscalidad verde', que los Presupuestos Generales del Estado no pueden crear impuestos y añadió que no es el momento de nuevas figuras impositivas.

En la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros, Salgado reiteró que la futura Ley de Economía Sostenible incorporará otras medidas fiscales para favorecer un crecimiento más sostenible.

Además, añadió que esas medidas no tendrán toda su presión en el lado de los ingresos, sino también en el de los beneficios fiscales.

El largo camino para su aprobación

Antes de llegar al Congreso, el proyecto del Gobierno será detallado por los altos cargos de los distintos ministerios, en comparecencias repartidas por las diferentes comisiones de la Cámara Baja.

La siguiente fase, crucial en la tramitación de los Presupuestos, es el debate de totalidad en el Pleno del Congreso. Los grupos tendrán hasta el 16 de octubre para presentar sus enmiendas de totalidad.

Si se supera este trámite, el proyecto de Ley de los Presupuestos Generales del Estado de 2010 pasará a debatirse en comisión, donde la oposición tendrá la oportunidad de forzar cambios puntuales, mediante enmiendas, en el texto del Gobierno. El plazo para la presentación de estas enmiendas parciales concluirá dos días después del Debate de Totalidad.

El siguiente paso es la aprobación del dictamen en el Pleno. Si el Gobierno supera la prueba, su proyecto presupuestario, el último de la legislatura, será remitido al Senado, en donde cabe la posibilidad de que sea devuelto al Congreso.

Esta posibilidad obligaría de nuevo a la Cámara Baja a salvar el texto presupuestario elaborado por el Gobierno de cara al próximo ejercicio mediante el respaldo de una mayoría absoluta de la Cámara, para su consiguiente aprobación definitiva. Si no hay veto del Senado, el texto llegará en diciembre al Congreso para la votación definitiva.

¿Con qué apoyos contaría el Gobierno?

Todo parece indicar que para la aprobación de los próximos Presupuestos el Gobierno deberá jugar lo más sutilmente posible con lo que Zapatero llamó en su día "geometría variable". Actualmente, el Ejecutivo reconoce estar a abierto a pactos con los diferentes grupos.

De momento, el Gobierno no se ha asegurado aún la aprobación de las segundas cuentas públicas de la legislatura, aunque parece que ha encontrado cierto acercamiento de posturas con el PNV. Por su parte, CiU ha adelantado ya que seguramente presentará una enmienda a la totalidad del texto motivada por la subida de impuestos.