China Crown reinventa la cocina imperial

Abrió sus puertas cuando los paladares madrileños daban las primeras muestras de interés hacia la cocina china. Fue hace 20 años y desde entonces China Crown se ha convertido en todo un referente manteniendo su espíritu hasta ahora.

Las bases de su gran acogida se basan en el respeto a una gastronomía tan rica como la del gigante asiático, tradicional e imaginativa, y unos precios interesantes. Ahora, celebra esta intensa trayectoria que suma dos décadas estrenando nueva estética y ofreciendo una suculenta cocina imperial.

Su propietaria, Maria Li Bao, quien ha trabajado en otros restaurantes como Hakkasan o Sushiwakka, es la artífice de la decoración.

Líneas depuradas, sobrios colores -rojo y negro-, y apenas unos detalles ornamentales, como los ábacos de más de cinco siglos de antigüedad, confieren al espacio una  atmósfera chic, idónea para todo tipo de encuentros en torno a una buena mesa.

Alta cocina china

En cuanto a los nuevos platos imperiales, es una selección de alta cocina china, con sabrosas reminiscencias de la época de los emperadores, como, por ejemplo, el China Crown Blossom, es decir, flores elaboradas con láminas de masa de trigo fritas, rellenas de cebollino y con salsa agridulce; Dim-Sum Imperial, crujiente y con relleno de solomillo, boletus y nuez; Rollitos de pato, Papillotes de langostinos y Bogavante al estilo Imperial, salteado con jengibre acompañado de tallarines. Junto con vino y postre, se puede tomar en forma de menú, a un precio de 35 € por persona.

En la carta, hay cosas que no cambian. Los clientes siempre esperan degustar, por ejemplo, los famosos Dim-Sum de la casa, elaborados según la receta tradicional, con ingredientes de primera calidad y una variedad de más de diez tipos. Desde los clásicos a otros más atrevidos como el de Pavo con cilantro o el de Calamares al toque de jengibre natural con salsa de Shitaki.

También se mantienen la Sopa Wan-Ton al estilo Shanghai, los Atados de loto, las bolitas de verduras crujientes, el auténtico Pollo Sichuan, recomendado para los amantes del picante, o el Turrón de pollo, perfecto para todos los públicos, ¡también para los más pequeños!, por su sabroso y original rebozado de almendras.

Li Bao demuestra su audacia y empeño por sorprender e introduce creaciones inéditas como el Mega roll de langostinos envueltos en arroz y algas y cubierto de queso fundido en salsa de fruta; los calamares asados con jugos de Teriyaki o la Codorniz crujiente al punto picante y ají.