La actividad de la administración para frenar la economía sumergida en la provincia cuenta con cifras oficiales: la Inspección de Trabajo da de alta en la Seguridad Social cada día a casi cuatro trabajadores, 349 detectados y sacados del ostracismo laboral en los tres primeros meses de 2009. La cifra media del presente año es similar a las que ofrecen los años 2008 y 2007: 1.279 y 1.240, respectivamente.

En el primer trimestre, Trabajo llevó a cabo casi 4.000 inspecciones en esta materia –es la provincia andaluza donde más se completaron– se topó con 434 infracciones –se vieron implicados 1.801 trabajadores– e impuso sanciones a empresas por 854.272 euros.

Un vistazo más amplio sitúa a Málaga en el primer lugar andaluz en número de incumplimientos legales de todo tipo, no sólo en lo relacionado a la Seguridad Social. Casi 10.000 inspecciones, 2,5 millones de euros en sanciones y 4.091 trabajadores afectados. Pero destacan sobre todo las 810 infracciones detectadas (casi 200 más que en Sevilla), una cifra que supera a las que se dan en comunidades enteras como el País Vasco (753) o Extremadura (771).

Para CC OO, los cuatro contratos diarios son una pequeña parte de la dimensión que tiene la economía sumergida en Málaga, casi imposible de cuantificar fielmente.

Su secretario general, Antonio Herrera, calcula que el pasado verano un 20% de la actividad productiva fue irregular e incide en el sector servicios como el más proclive. El método para combatirla es «hacerla aflorar», aunque Herrera considera que no es tarea fácil: «El trabajador no denuncia, toma el trabajo porque posiblemente se haya quedado sin desempleo».

Pocas infracciones en salud laboral

El área de seguridad y salud laboral de la Inspección arroja más de 3.000 actuaciones en el primer trimestre, aunque sólo 173 infracciones y tres paralizaciones.

Los sindicatos llevan años reclamando más personal y más control en las obras, donde se producen la mayoría de accidentes laborales (las bajas por contingencias profesionales suman 2.000 al mes). Además, la provincia ya ha sufrido en lo que va de año ocho muertes en el tajo. Aun así, no hay previsto que Trabajo vaya a incrementar su plantilla.