
"Maleza, árboles secos, basura y objetos abandonados como colchones y hasta chatarra". Hasta 10.000 kilos de residuos se han encontrado los operarios municipales en el entorno del Monasterio de la Cartuja, donde el Ayuntamiento está llevado a cabo un zafarrancho en profundidad desde el pasado jueves, en el marco del 'plan de choque' que suma ya cerca de 30.000 actuaciones en esta materia en los últimos tres meses.
Según fuentes municipales, se trata "una acción conjunta" que cuenta con la participación de un "amplio dispositivo" que actúa de manera coordinada y está formado por diferentes servicios municipales que son el servicio REUR de 'Respuesta Urbana', el área municipal de Parques y Jardines y Lipasam.
Precisamente esta semana se han incorporado a la plantilla de la empresa municipal de limpieza 200 operarios más, se han estabilizado 450 empleos y se ha creado una bolsa de empleo temporal para atender las necesidades extraordinarias de la ciudad. Una medida que responde al "compromiso" de Sanz por la limpieza desde que llegó a la alcaldía, de "reforzar el servicio de limpieza y recogida de residuos en la ciudad", ha destacado el regidor al tiempo que ha puesto en valor el trabajo de los trabajadores de Lipasam así como el "enorme esfuerzo que estamos haciendo para mejorar este servicio público" para que las calles estén limpias "pese a las circunstancias encontradas".

Como ha detallado el primer edil, una de estas zonas, que viene padeciendo "años de abandono" es La Cartuja. La actuación que se está llevando a cabo tiene como objetivo "adecentar los alrededores" de este enclave, en el que "tras años sin intervenir se acumulaba maleza, árboles secos, basura y objetos abandonados como colchones y chatarra", ha concluido el alcalde.
Comentarios