Según cuál sea tu generación, habrá un tipo de imagen de George Kennedy grabada en tu retina. El actor estadounidense, que falleció ayer a los 91 años, tenía una de esas filmografías caudalosas e inabarcables, cercana a los 200 títulos entre cine y televisión. Pero fue todo un papel el que le brindó su pasaporte de leyenda: como Dragline frente a Paul Newman en La leyenda del indomable (Stuart Rosenberg, 1967). De ahí también se llevó un merecido Oscar de Mejor actor de reparto.
Sin embargo, para muchos otros espectadores George Kennedy será sinónimo de dos sagas cinematográficas de las décadas posteriores, cada una con distinta pregnancia y, quizás tan sólo aparentemente, tono: la franquicia de catástrofes aéreas Aeropuerto, iniciada en 1970, de la que llegó a protagonizar cuatro entregas (1970, 1975, 1977 y 1979), y que contribuyó a hacer de Kennedy una presencia habitual en otras muestras de un género muy popular en los 70, como Terremoto (Mark Robosn, 1974); y la saga paródica del cine policiaco Agárralo como puedas, cuyas tres entregas protagonizó junto a Leslie Nielsen en el papel del capitán de policía Ed Hocken.
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