Un enfermo mental hondureño que vivió en cautiverio durante 19 de sus 24 años en una colonia marginal de Tegucigalpa ha sido rescatado por el Cuerpo de Bomberos y agentes del Ministerio Público, informó este viernes la prensa local.

Se trata de un joven identificado como Luis Alonso Ramírez, quien según informaciones preliminares, ha estado confinado en una especie de corral desde que tenía cinco años.

Una portavoz de la Fiscalía de Derechos Humanos dijo a periodistas que Ramírez, quien fue rescatado el jueves, presenta un grave estado de desnutrición, lo que se evidencia en las fotografías que publican los cuatro diarios que se editan en Honduras.

Agregó que Ramírez, quien no habla y al parecer tampoco oye, pudo haber permanecido encadenado desde los cinco años en un espacio similar a un corral, en el que comía y hacía sus necesidades fisiológicas.

No estaba atado

Un pariente de Ramírez, identificado como Ariel Fernando Núñez, indicó que el joven no estaba atado y que el cerco donde vivía fue construido para que no saliera a la calle porque podría ser atropellado por un vehículo, debido a su enfermedad mental.

Agregó que Luis Alonso es agresivo, aunque no explicó por qué razones no buscaron la ayuda de instituciones públicas para que recibiera la atención médica que requería.

Una supuesta tía de Luis Alonso, identificada solamente por su nombre, Blanca, relató que la madre del joven, Betty Valladares, se fue a Estados Unidos cuando su hijo tenía dos años. Blanca indicó además que ella cuidaba a Luis Alonso desde los cinco años, y atribuyó la desnutrición severa que padece a que no quería comer.

El Ministerio Público ha abirrto una investigación sobre el caso.