Ciutadans perdió un 80,9% de votos en las elecciones municipales, mientras que ERC cayó un 36% en comparación con los comicios de hace cuatro años. Son las dos fuerzas que sufrieron un mayor retroceso en número de votos absolutos, seguidos de la CUP, un 24,3%, y los comunes, un 18,95%. El PSC perdió un 7,2% de los sufragios, mientras que Junts, un 1%. Solo Vox, que ha cuadruplicado los apoyos con una subida del 315% y muchas más listas presentadas, y el PP, con un 52,7% más respecto al 2019, han experimentado ganancias.
El contexto era de bajada de participación, con un 13,2% menos de papeletas emitidas, aunque el censo era de casi 70.000 personas más. Así, Cs, ERC, comunes y CUP bajan en porcentaje de voto, mientras que el resto sube.
El bajón de Ciutadans fue de 155.808 votos, pero fue Esquerra el partido que más perdió en números absolutos, con 301.747 menos. Los partidos municipales agrupados en el entorno de En Comú Podem retrocedieron en 62.199 sufragios, mientras que el PSC, en 55.486, y la CUP, en 43.045. Junts recibió 5.787 apoyos menos que hace cuatro años, si bien en 2019 se presentó con el PDeCAT, que ahora ha logrado 55.452 votos con la marca Ara, Pacte Local. El PP creció en 85.267 papeletas y Vox, en 114.413.
Por demarcaciones, en Barcelona, Ciutadans ha perdido el 87% de los votos, con una diferencia negativa de 210.891, y Esquerra ha descendido un 41,6%. Las 86.469 personas que votaron a Ernest Maragall en el 2019 y no lo han hecho ahora en la ciudad de Barcelona representan un tercio de las 237.450 que han abandonado el partido en toda la demarcación.
Por el contrario, Xavier Trias ha impulsado el ascenso de Junts en el mismo área, ya que 69.955 electores más han apostado por Junts en la capital catalana comparado con 2019. Mientras Vox y el PP son los únicos que suben, el PSC pierde 58.000 sufragios, los comunes 50.386 y la CUP, 33.838.
En las comarcas gerundenses, Ciutadans cayó un 88%, 12.187 votos menos, Esquerra modera la caída al perder un 29,6% y 27.203 votos, los comunes bajan un 22,8% con 2.130 votos menos, y Junts desciende un 19, 3%, lo que significa 19.218. La CUP pierde un 8,9% de electores y el PSC, un 6.9%, con 2.278 y 2.958 votos menos respectivamente.
Siguiendo la tendencia general, Vox experimenta un aumento de apoyos de un 214% y 5.870 votos más, y el PP incrementa su porcentaje de voto en un 26,1%, 1.487 papeletas más.
En las comarcas de Lleida, un patrón similar se repite, con Cs en caída libre, un 89% de bajada perdiendo 6.672 votos, pero los comunes descienden más que en la media catalana, ya que bajan un 52,3% dejándose 3.629 votos. ERC y Junts sufren bajadas muy similares, un 25,3% y un 25,5% respectivamente, y con 16.350 sufragios menos los republicanos y 16.371 votos perdidos por parte de Junts.
La CUP se deja tan solo un 12,6%, lo que equivale a 907 votos. La circunstancia beneficia al PSC, que sube un 34,3% y 7.908 votos, mientras que el PP aún incrementa más, un 73,2% de electores respecto a 2019, cuando obtuvo 4.413 papeletas.
En cuanto a la demarcación de Tarragona, las cifras son similares con Cs, que cae un 89,2% de votos, es decir, 25.510, pero existen algunas diferencias con el resto. La CUP cae un 37,2%, lo que le supone dejarse 6.022 sufragios, los comunes descienden un 32,7% y 4.855 votos, Esquerra pierde 21,4%, en cifras absolutas 20.374, y Junts se deja un 9,8%, o lo que es lo mismo, 7.322.
Los socialistas logran 4.030 votos más que en 2019, un 6,1%, mientras que el PP se sitúa primero en subida de apoyos al lograr crecer un 37,2% y acaparar 4.855 sufragios más.
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