Las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo han dejado, como suele ocurrir, episodios dignos de ser comentados en la jornada post electoral. Así, este lunes, Espejo Público ha prestado especial atención a uno de ellos.

Tal como ha comentado el matinal de Antena 3, la presidenta de una mesa electoral de un colegio de Inca, en Mallorca, decidió ir a tomar un café una hora después de abrir el centro escolar para que los ciudadanos ejercieran su derecho a voto y, ante la sorpresa de todos, no regresó a su puesto.

La obligatoriedad de ocupar estos puestos de responsabilidad supone que, en este tipo de casos, la Policía Local busque a la mujer en su domicilio habitual. Sin embargo, al no encontrarla, el centro tuvo que cerrar sus puertas hasta que, sobre las 13:00 horas, su suplente ocupó su puesto.

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Ahora, la mujer se enfrenta a un delito por abandono de mesa electoral. Sin embargo, este no ha sido un caso aislado, pues en Avilés un vocal decidió abandonar la mesa para fumar... y tampoco regresó. Además, en este caso, el ciudadano se llevó 70 euros. Al parecer, este ciudadano contaba con varios antecedentes policiales y delictivos relacionados con las drogas.

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Así, tal como ha explicado la abogada penalista Beatriz de Vicente desde el plató del programa de Antena 3: "La ley de los delitos electorales, que es de 1985, contempla varios supuestos, pero abandonar una mesa electoral o no concurrir cuando se es llamado como presidente o como vocal puede suponer penas de hasta un año de prisión y 24 meses de multa".

"Cuidado, interrumpir un acto electoral son hasta dos años de prisión. Con esto quiero decir que depende de cómo lo veamos. El hecho de que yo abandone, es un delito en sí, pero si abandono también estoy interrumpiendo un acto electoral porque si no hay vocal o presidente son hasta dos años de prisión", ha agregado la letrada.