El Gobierno asegura el "garantismo" de las elecciones en Melilla pese a las detenciones por presunta compra de votos

Isabel Rodríguez, portavoz del Gobierno y ministra de Política Territorial, en rueda de prensa en Moncloa.
Isabel Rodríguez, portavoz del Gobierno y ministra de Política Territorial, en rueda de prensa en Moncloa.
EFE/ Juan Carlos Hidalgo
Isabel Rodríguez, portavoz del Gobierno y ministra de Política Territorial, en rueda de prensa en Moncloa.

Habrá elecciones el próximo domingo en Melilla. Y serán garantistas. Así lo asegura el Gobierno tras la operación policial puesta en marcha por la presunta compra de votos por parte de responsables de la formación Coalición Por Melilla, partido de gobierno y cuya sede ha sido registrada en la mañana de este martes. Ya hay un total de nueve detenidos y se han realizado alrededor de once registros simultáneos para tratar de desarticular la trama que se dedicaba a la compra de papeletas. Esto no hará, en cambio, que se anulen las votaciones por correo. Fuentes del Gobierno explican que es competencia de la Junta Electoral Central, pero lo ven como una opción remota.

"Se ha producido una anomalía y se ha actuado judicial y policialmente”, ha reconocido este martes Isabel Rodríguez, portavoz del Ejecutivo. La también ministra de Política Territorial ha asegurado que, pese a la operación policial abierta, ha quedado "constatado" que en España "nadie puede saltarse las normas". “Lo prudente es poner en valor ese garantismo que implica nuestro proceso electoral", ha insistido.

¿Crees que el Gobierno debería promover el retraso de las elecciones en Melilla por el supuesto fraude en el voto por correo?

A preguntas de los periodistas, ha asegurado que es "muy importante" garantizar un "derecho fundamental, el del voto libre". En este punto, ha abierto la puerta a reformar la ley electoral, un texto que “siempre es susceptible de mejora”. No obstante, fuentes gubernamentales han cerrado la puerta después a realizar cambios ahora por las posibles suspicacias que levantaría. La posible reforma de la ley electoral fue adelantada hace dos días por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Desde Melilla, aseguró que el Ejecutivo estudiaba la posibilidad de exigir la identificación del votante por correo a la hora de emitir el voto, y no solo al pedirlo y al recibir la documentación electoral.

Ese recodo era el que quería aprovechar la trama que la Policía trata de desarticular. Aprovechando que la ley no exige el DNI a la hora de depositar el voto en una oficina de Correos, ofrecían dinero a personas desfavorecidas a cambio de su documentación electoral. Además, hace dos semanas se produjeron al menos cinco asaltos a carteros para robarles documentación electoral, delitos que obligaron a incrementar la seguridad de los funcionarios de Correos por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.

Tras aprobarse la identificación con DNI en Melilla, la Guardia Civil detectó que la trama intentó llevarse el voto a distancia fraudulento a la península para depositarlo en oficinas de Correos de otros puntos de España. Alertada de esta práctica, la Junta Electoral Central amplió la obligatoriedad de identificarse por DNI a toda España cuando el destino del voto por correo depositado sea una mesa electoral melillense

Los datos actualizados este martes por el Ministerio del Interior revelan que de los 11.707 votos por correo solicitados en Melilla, se han presentado en Correos 1.882, el 16%. De ellos, 761 lo hicieron antes de que la Junta Electoral acordara el pasado 17 de mayo la identificación mediante DNI.

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