Qué es la Ley d'Hont y cómo influye en el resultado de las elecciones

Imagen de archivo de una mesa de votación electoral.
Imagen de archivo de una mesa de votación electoral.
EUROPA PRESS
Imagen de archivo de una mesa de votación electoral.

El próximo 28 de mayo tenemos doble cita electoral: se celebran las elecciones autonómicas y municipales y, como cada año que nos toca votar, vuelve a abrirse el debate sobre la Ley D'hont, el sistema para repartir los escaños de cada partido político en función de los votos obtenidos. Pero, ¿cómo funciona este sistema y por qué siempre hay españoles que abogan por cambiarlo? ¿Se hace igual en otros países europeos?

Lo primero de todo es saber en qué consiste la Ley D'hont. Este método se utiliza para repartir los diputados entre las candidaturas de forma proporcional al número de votos obtenidos. Como ejemplo, vamos a simular un parlamento con ocho diputados a repartir entre cuatro candidaturas que llamaremos A, B, C y D.

"En primer lugar, se ordenan de mayor a menor los resultados obtenidos por cada candidatura y se calcula el porcentaje de votos de cada una teniendo en cuenta también los votos en blanco", expresan desde la web del gobierno Info Electoral. "Para evitar una excesiva fragmentación de la cámara, se descartan las candidaturas que no lleguen a un porcentaje mínimo de votos (En el caso de las elecciones generales el mínimo es un 3 por ciento y en las municipales y autonómicas un 5 por ciento)".

Después, se construye una tabla con tantas columnas como número de diputados a distribuir, completando cada columna con el número de votos de cada candidatura dividido por 1, 2, 3... has completarla. "Los diputados se asignan a los ocho coeficientes más altos, en orden decreciente", explican en la web. "En caso de empate, el diputado se asignará a la candidatura con mayor número de votos totales y, si estos también coinciden, se asignará por sorteo".

¿Por qué el sistema no es proporcional?

Este sistema beneficia a los partidos grandes y perjudica a los pequeños y no se ajusta a lo que vota el electorado, ya que puede ocurrir que una formación con menos votos obtenga un mayor número de escaños. Además, mientras que en los municipios y autonomías en las que se eligen muchos escaños, el resultado es más proporcional, en aquellas con menos escaños no es así, ya que para poder logar un escaño es necesario llegar a un número muy alto de votos.

Es por este motivo que muchos están en contra de emplear este sistema a la hora de repartir los escaños o diputados. Pero, ¿qué sistemas utilizan nuestros países vecinos?

En Reino Unido e Irlanda, por ejemplo, se utiliza el sistema de la Mayoría Relativa, donde el candidato ganador es quién obtiene más votos, sin necesidad de llegar a la mayoría absoluta y en el que los escaños son proporcionales al número de votos (de ahí que sea más probable que se formen dos grandes partidos y no se produzca, a penas, fragmentación parlamentaria.

Por otro lado está el Sistema de Doble Ronda, que se utiliza en Francia y Rumanía, entre otros. Este sistema consiste en realizar dos votaciones, permitiendo al electorado otra oportunidad más de elegir a sus representantes. No obstante, no todos los representantes forman parte de la segunda ronda y, por ese motivo, se produce mucho la abstención de voto.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento