Unidas Podemos observa con cautela el anuncio del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de que sumará en los próximos meses 43.000 nuevas viviendas en toda España al parque de alquiler social. Este miércoles, unos minutos después de que Sánchez planteara esta nueva medida, la secretaria general de Podemos y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, la calificó de "preelectoral" y admitió que el PSOE no había informado a su socio morado antes de hacer el anuncio. "Para que se cumpla vamos a tener que desplegar toda nuestra capacidad política como Podemos", pronosticó Belarra.

PSOE y Unidas Podemos llevan varios días disputándose la bandera de la vivienda a las puertas de la campaña electoral de las elecciones autonómicas y municipales del 28M, donde las dificultades para acceder y pagar un piso que sufren millones de familias se perfilan como uno de los ejes de la estrategia política de los partidos progresistas. El pasado viernes, tras muchos meses de negociación encallada, ERC y EH Bildu anunciaron un acuerdo con el Gobierno para aprobar por fin la ley de vivienda que dará a las comunidades herramientas para regular los precios del alquiler. Y el lunes, Sánchez anunció que 50.000 viviendas propiedad de la Sareb se pondrán en régimen de alquiler social.

El nuevo anuncio de que otros 43.000 inmuebles entrarán al mercado de alquiler social, por tanto, es una nueva pieza de esta estrategia que ha puesto en marcha el PSOE para hacer gala de su compromiso con el acceso a la vivienda a las puertas de las elecciones. No obstante, para Unidas Podemos la promesa de Sánchez de este miércoles suscita dudas porque, para empezar, el presidente no ha ofrecido detalles sobre de dónde saldrán esas viviendas, más allá de que algunas se construirán y otras se rehabilitarán para que puedan ser alquiladas.

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"Todo el mundo ha visto lo que ha ocurrido a lo largo de estos tres años de legislatura" y "todo el mundo es consciente de que, para que se cumplan estos anuncios preelectorales del PSOE, Podemos tiene que seguir gobernando con fuerza", afirmó Belarra. Es más: para la ministra, el paso que ha dado Sánchez "tiene que ver con todas las exigencias y medidas" que los morados han "desplegado durante la legislatura", pero se trata de un anuncio que "nunca se va a cumplir si no es por la influencia y el esfuerzo de Podemos por poner el derecho a la vivienda como una condición sine qua non" para que la legislatura pueda calificarse de progresista.

Esa realidad, aseguró Belarra, se ha podido comprobar durante la tramitación de la ley de vivienda, que ha tardado tres años en cerrarse y en la que la propia ministra de Derechos Sociales ha llevado la batuta de la negociación con el Ministerio de Transportes de Raquel Sánchez. "Lo fundamental es que tengamos ley de vivienda y lo fundamental es que después del 28 de mayo siga habiendo prioridad para garantizar el derecho a la vivienda", planteó.