El Juzgado de lo Penal número 1 de Zaragoza ha condenado a 18 meses de prisión por un delito de maltrato animal al propietario de las instalaciones de un criadero de perros ilegal situado en la localidad zaragozana de Maella.

Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil intervinieron en mayo de 2020 este criadero de perros instalado en una antigua granja de conejos, donde hallaron 544 canes "en condiciones higiénico-sanitarias deplorables".

Los agentes encontraron numerosos animales encerrados en jaulas de dimensiones reducidas por ser para conejos y no para perros, lo que implicaba su hacinamiento e insalubridad, ya que debido al reducido espacio, los animales defecaban y orinaban encima de la propia comida.

El estado de los perros era tan deficiente que siete de ellos murieron en los días posteriores a la intervención policial.

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Desde ANADEL (Asociación Nacional de Animales con Derechos y Libertad), que ejercitó la acusación popular, se han mostrado satisfechos con la sentencia

"Entendemos como muy relevante este fallo judicial porque se reconoce como probados los hechos, que implicaron la muerte de varios animales y la realización de una actividad sin licencia alguna, que ahora se encuentra prohibida con la actual legislación de protección animal", señalan.

La asociación también resalta que "se ha impuesto la mayor pena en Aragón de 18 meses de prisión, 4 de inhabilitación especial para la tenencia de cualquier tipo de animal y la obligación de asistir a un curso de reeducación contra el maltrato animal, además del abono de la responsabilidad civil y las costas procesales".

Asimismo, esperan que la condena "sea lo suficientemente disuasiva para evitar que estos deleznables hechos se vuelvan a repetir en el futuro".