Los forenses del Instituto de Medicina Legal de Cantabria han concluido las autopsias de los dos marineros que murieron tras el naufragio del Vilaboa Uno en la costa de Santander en la madrugada del lunes. A las 14.00 horas del martes firmaron el informe de la autopsia, que será incorporado a la investigación judicial, tal y como informa El Diario Montañés.

Uno de los muertos es de Ghana. Se llamaba Gogfrey Kofi Buabeng, tenía 58 años y era el cocinero del buque. El otro era Francisco San Pedro Faleato. Natural de Santander, tenía 57 años y le quedaban tres meses para jubilarse. Era muy conocido en la zona y llevaba toda la vida dedicándose al oficio.

Cuando llegaron los primeros barcos a la zona del hundimiento para rescatarlos, ya no pudieron hacer nada por sus vidas. Ambos sufrieron hipotermia severa, al igual que otro tripulante, que ya fue dado de alta en el hospital el mismo lunes.

A disposición de las familias

El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha confirmado que los cuerpos ya están a disposición de las familias, después de que terminasen los trabajos de los forenses.

"Ante una situación de estas hay que entender que se pidan medidas inmediatas de ver a los fallecidos. Les hemos explicado que hay unos procedimientos judiciales. Los forenses han hecho ya su trabajo", ha apuntado el regidor autonómico.

Los familiares de las víctimas denunciaron este martes la falta de información por parte de las autoridades. La hermana de Faleato reclamó saber "la verdad" sobre lo sucedido y ver el cadáver del mismo. "¿Dónde está mi hermano?, ¿dónde? Hemos ido al juzgado, se ha ido a comisaría, ya no sé ni a dónde tenemos que ir", gritó durante el minuto de silencio por las víctimas.

La mujer aseguró sentir "rabia e impotencia" y tachó de "sinvergüencería" la actuación de las autoridades. No pudo identificar al marinero ni recibió ninguna llamada tras haber pasado "muchas horas", explicó a los medios.

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Falta de información

Revilla también ha respondido el martes por la tarde a las críticas de la mujer de uno de los fallecidos, que lamentaba haberse enterado de la tragedia por redes sociales. "Les hemos explicado que no se podía llamar a la gente sin saber cuántos eran los fallecidos. Es complicado y los familiares lo entienden malamente", ha comentado.

El presidente autonómico ya había explicado durante el minuto de silencio que tuvo conocimiento del naufragio a las 7.10 horas, pero quien tenía que haberlo notificado a la familias era Salvamento Marítimo. "No tengo capacidad ni competencia para hacerlo", agregó.