Hija del príncipe Friso, apasionada del arte y los deportes y muy unida a su familia: así es la condesa Luana, que acaba de cumplir 18 años

La condesa Luana, hija del príncipe Friso, y su hermano.
La condesa Luana, hija del príncipe Friso, y su primo Claus.
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La condesa Luana, hija del príncipe Friso, y su hermano.

La familia real de Países Bajos está de cumpleaños. La condesa Luana de Orange-Nassau, primogénita del príncipe Johan Friso y Mabel, ha entrado en la mayoría de edad. La joven, que no forma parte de la línea sucesoria, es además sobrina de los reyes Guillermo y Máxima.

Actualmente vive en Londres con su madre y su hermana pequeña, Zaria. Allí lleva una vida muy tranquila y discreta, lejos del foco mediático. Sin embargo, mantiene una estrecha relación con la familia de su padre.

La condesa Luana apareció públicamente por primera vez en un posado oficial en los brazos de su abuela, la entonces reina Beatriz, y con sus padres, coincidiendo con el aniversario de boda de estos. Fue bautizada en diciembre de 2005, en una ceremonia en la que ejercieron como padrinos el príncipe Constantino, su tío paterno; Eveline Wisse Smit, la hermana de su madre; la baronesa Sophie von der Recke, prima de su padre; y Emma Bonino, una amiga de la familia.

Emma Luana Ninette Sophie, que es como realmente se llama, es prima de la princesa Alexia, con la que se lleva tan solo unos meses. Tienen una gran relación como quedó patente durante los Juegos Olímpicos de Londres 2012, cuando vimos las dos, junto a la princesa heredera Amalia, se divirtieron animando a los deportistas de su país.

Otro de los grandes apoyos de Luana dentro de la Casa Real es su primo Claus, el hijo de los príncipes Constantijn y Laurentien y hermano de la condesa Eloísa. Con él comparte la pasión por el arte por lo que acudieron juntos a la galería de arte de Londres, tal y  como compartió el joven en las redes sociales.

Es una gran apasionada de los deportes acuáticos como la vela. De hecho, tal y como cuenta Vanitatis, en 2022 ganó los campeonatos escolares de Itchenor donde participaron más de treinta equipos. Otra actividad que le gusta mucho es el esquí, que sigue disfrutándolo junto a su familia en Austria.

A pesar de su juventud, está muy comprometida con las causas sociales, al igual que su madre, quien es la consejera de diferentes asociaciones de lucha contra el sida o contra la abolición de los matrimonios infantiles.

Luana lleva una vida muy feliz, aunque le falta la figura paterna puesto que el príncipe Friso quedó sepultado mientras esquiaba en la estación austriaca Lech en 2012. Aunque en un principio quedó en coma, finalmente falleció el 12 de agosto de 2013, lo que dejó una gran herida en toda la familia.

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