Uno de los electrodomésticos más útiles del hogar y, al mismo tiempo, de los que más se ensucian, es la sandwichera. Aunque hay quienes evitan limpiarla porque les parece una tarea compleja, lo cierto es que hay que mantenerla en buen estado si se quiere evitar que contamine las comidas y no pierda su antiadherencia, ya que entra en contacto directo con los alimentos y los productos que se cocinan en el aparato dejan residuos, como migas o trozos de queso.

Ya sea para preparar el desayuno, la merienda o incluso una cena rápida, la sandwichera se usa con frecuencia. Precisamente porque se utiliza para preparar la comida en pocos minutos, en ocasiones ni siquiera se desenchufa de la corriente y, con frecuencia, se olvida su limpieza tanto por fuera, como por dentro. Con el paso del tiempo, los residuos que se quedan en su interior se adhieren a las placas del aparto y se descomponen, generando mal olor e insalubridad.

Por tanto, para alargar su vida útil es fundamental aprender a limpiarla de forma rápida y sencilla en tan solo unos minutos. Basta con seguir los trucos y consejos que se explican a continuación para que quede reluciente.

Pasos para limpiar la sandwichera

Antes de empezar a limpiar la sandwichera, hay que asegurarse de que se tienen los materiales necesarios: trapo de algodón o microfibra, espátula de madera o plástico, agua tibia o caliente, jabón de lavavajillas y papel de cocina.

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Para quitarle mejor la suciedad, es ideal que el aparato esté todavía un poco caliente, aunque no hay que olvidarse de apagarla y desenchufarla de la corriente. Si tiene queso o cualquier otro ingrediente en la superficie, hay que retirarlo con un trapo húmedo antes de que se seque. En caso de que esté muy sucia y haya quemado o restos de grasa de aceite, es aconsejable colocar un trozo de papel de cocina en el interior, cerrarla y, tras esperar unos segundos, abrirla y retirarlo. Si los residuos están muy pegados, se recurre a una espátula de plástico para eliminarlos.

A continuación, se echa un chorrito de detergente en la sandwichera. Se humedece una esponja y se exprime el exceso de agua, hasta que se quede casi seca. Con la parte suave, comienzan a limpiarse las placas -se puede usar jabón para quitar la grasa acumulada-.

Por último, con un trapo suave y húmedo, que no deje pelusas, se limpia el interior y el exterior del aparato para que desaparezcan los restos de jabón. Se deja abierta para que se seque antes de guardarla y que no se quede mal olor, y ya estaría listo.

Cómo evitar que el queso fundido se quede pegado

Sin duda, una de las cuestiones que más se resisten a quienes usan la sandwichera es la limpieza del queso fundido que se queda pegado. Sin embargo, hay un truco casero y muy fácil que es posible seguir para mantener el electrodoméstico impoluto, al margen de las veces que se utilice.

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Solo se necesita un trozo de papel de horno, que debe recortarse de forma que cubra toda la superficie. Una vez colocado, se pone encima el sándwich y se usa el aparato como se hace habitualmente. De esta forma, el queso no se quedará pegado.

Otro truco para asegurarse de que no se ensucie, aunque este es un poco más obvio, es intentar que las lonchas de queso no sobresalgan de los bordes del pan.