La Audiencia Provincial de Logroño acoge desde este lunes el juicio con jurado contra Francisco Javier Almeida, considerado presunto autor del asesinato y agresión sexual al niño de nueve años Álex, cuando jugaba en un parque de Lardero (La Rioja) el 28 de octubre de 2021.

Es la segunda vez en la que Almeida, quien estaba en libertad condicional desde abril de 2020, se enfrenta a un juicio con jurado. En el primero fue condenado, por sentencia firme de 2001, a 30 años de prisión por el asesinato y agresión sexual a una agente inmobiliaria, ocurrido en Logroño en 1998.

El fiscal y las acusaciones particular, ejercida por la familia de Álex; y popular, en representación de la Asociación Clara Campoamor, piden la pena de prisión permanente revisable por el delito de asesinato y 15 años de cárcel por el de agresión sexual.

Pesadilla en la noche de Halloween

Según el relato del fiscal, hacia las 20:30 horas del 28 de octubre de 2021, Almeida se acercó a Álex, quien jugaba en el parque disfrazado de "niña del exorcista", y logró que le acompañara a su domicilio con la excusa de cuidar de un perrito que le aseguró que tenía en su casa.

Ya en el domicilio, Almeida condujo a Álex al dormitorio, donde le agredió sexualmente y, sin que el menor pudiera defenderse ni pedir auxilio, le inmovilizó al poner el brazo sobre el cuello "con ánimo de causarle la muerte por asfixia", añade el escrito del Ministerio Fiscal.

Los vecinos y policías que buscaban a Álex, tras el aviso dado por una de las niñas que estaban en el parque, se encontraron a Almeida en la escalera, con el cuerpo del menor sin vida en brazos, ya que pretendía acceder al garaje para deshacerse del cadáver con su coche.

Tras la detención de Almeida allí mismo y una vez realizadas las instrucción por la Guardia Civil, ingresó en la prisión de Logroño y siete días después del suceso fue trasladado a la de Segovia por medias de seguridad.

Estaba en tercer grado

Almeida, cuya condena terminaba el 17 de agosto de 2023, accedió al tercer grado con la oposición de la mayoría de los miembros de la Junta de Tratamiento de la cárcel de El Dueso (Cantabria), donde estaba internado, porque consideraron que había riesgo de reincidencia.

El pasado mes de enero, con la aplicación de la ley de garantía integral de la libertad sexual, conocida como ley del solo sí es sí, se rebajó de 10 a 8 años de la pena que se le había impuesto por la agresión sexual que cometió en 1998.

Además, este hombre, nacido en 1967, ya fue condenado en 1993 a 7 años de prisión por la agresión sexual a una menor