La noticia se empezó a rumorear en la primavera de este año: Viggo Mortensen podría estar planteándose una retirada del cine. El actor norteamericano, de descendientes nórdicos y que ha vivido parte de su vida en sudamérica no ha rodado nada en lo que va de año y The Road, la cinta con la que ha aparecido en Venecia, estaba finalizada en 2008.

"¿Se está tomando un descanso en su trabajo o va abandonar el cine?", le pregunta un periodista en un encuentro con la prensa. "No parece que esté en un parón, al menos aquí en Venecia", se ríe. El intérprete asegura que tiene varios proyectos entre manos y que su próximo trabajo va a ser una obra de teatro en España. "Voy a interpretar Purgatorio, de Ariel Dorman [junto a Ariadna Gil] y luego quizás haga algo en Argentina".

La relación de Viggo con Argentina es longeva. El artista vivió en el país sudamericano una temporada y es fan declarado de San Lorenzo de Almagro. Se presenta ante la prensa con una camiseta de la selección albiceleste y el 18 de Messi a la espalda, "jugamos contra Brasil, nos va a hacer falta mucha suerte", bromea.

Un arstista total

La noticia de una posible retirada sacudió al mundillo cinéfilo porque en él recaen dos papeles que muchos seguidores esperan ver en pantalla. Por un lado, David Cronenberg está preparando una continuación de Promesas del este y en la otra banda está Aragorn, el personaje que le ha hecho mundialmente conocido y que debería aparecer en El hobbit, la adaptación de la novela de Tolkien que está preparando Guillermo del Toro.

Mortensen, de 50 años, es lo que algunos llaman un artista total. Además de la interpretación, también se dedica a la pintura, la poesía, tiene algún que otro libro de fotografía e incluso ha grabado discos. La retirada del cine sería solo una faceta que dejaría de lado en una carrera extremadamente prolífica.

Aunque ya lo confirma el propio actor, que no entra en sus planes más cercanos. La Mostra de Venecia va a servir, por si no tuviera suficiente, para aumentar su reconocimiento como un referente dentro de su generación, un tipo capaz de dar vida al heredero de Gondor en la fantasía épica de Peter Jackson y a la vez ponerse en la piel de un padre que debe proteger a su hijo en medio de un mundo arrasado por un holocausto nuclear. "Creo que esta es la historia más universal que se ha escrito. ¿Qué padre no se preocuparía por su hijo?", concluye.