La okupación se ha asentado en España como una gran preocupación para los propietarios de viviendas, quienes temen que una o varias personas se instalen en un inmueble deshabitado sin su consentimiento. El Ministerio de Interior ha facilitado a idealista los últimos datos registrados respecto a esta actividad, aunque no discriminan entre usurpación y allanamiento, y, según las cifras, este fenómeno ilegal ha perdido peso bajando un 5,43% en un año.

Comparando enero y julio de 2021 y el mismo periodo de 2022, la  Administración indica que en el primer semestre del año pasado había un total de 10.220 okupaciones, un 5,43% menos que las que se contabilizaron en los primeros meses de 2021. Así, Madrid y Andalucía han reducido este fenómeno un 15,4% y un 6,26%, respectivamente, pero hay otras regiones, como la Comunidad Valenciana o Extremadura, que han visto incrementada esta actividad hasta un 23%.

A pesar de no poseer el mayor descenso, estas comunidades autónomas han logrado disminuir de manera significativa la okupación, siendo dos de los puntos donde más denuncias de este tipo se producen. La capital española registró en los primeros seis meses de 2021 un total de 1.078 ocupaciones ilegales, mientras que entre enero y julio de 2022 ese dato se redujo hasta las 912. 

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Andalucía, por su parte, ha reducido esta actividad en menor medida que Madrid, pero sí ha conseguido un gran objetivo: un descenso en todas sus provincias, menos en una. De este modo, Huelva alcanza una caída del 21,67%; Almería un descenso del 14,93% y Córdoba se queda muy cerca al concentrar disminución del 14,05%. Sevilla es la única que sí ha aumentado el número de casos, en un 3,74% al pasar de 455 a 472.

Las regiones donde más se ha reducido la okupación son Ceuta y Melilla, con unos descensos del 41,67% y del 33,33%, respectivamente. En concreto, Ceuta pasa de doce casas okupadas a siete, mientras que Melilla registra nueve viviendas okupadas en los seis primeros meses de 2021 a seis en el mismo periodo de 2022. Sin embargo, en estos casos el número no es tan significativo como en Andalucía o en Madrid, puesto que estas tienen mayor extensión de terreno y aglutinar más población. 

Por detrás de las dos ciudades autónomas se encuentran Baleares y Navarra, con caídas del 31,12% y 26,44%, respectivamente. La primera ha registrado 331 okupaciones en el primer semestre de 2021 y 228 en el mismo periodo de 2022. Por su parte, Navarra ha pasado de 87 viviendas okupadas a 64. Estas dos regiones están muy lejos en cuestión de número total de inmuebles okupados.

Cataluña reúne más del 42% de casas okupadas

El caso de Cataluña es diferente a los demás. Esta comunidad ha conseguido reducir la okupación incluso por encima de Andalucía, con una caída del 6,42%. No obstante, el último dato facilitado por Interior señala un total de 4.341 viviendas okupadas, es decir, aglutina algo más del 42% de todas los casos en España.

Además, una investigación judicial ha desvelado que, en esta región, las mafias especializadas en la okupación de viviendas se embolsan miles de euros gracias a los pactos a los que llegan con los grandes propietarios, como bancos o fondos de inversión, para abandonar los inmuebles a cambio de percibir una compensación económica.

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¿Dónde ha aumentando más la okupación?

Solo hay tres comunidades autónomas donde el número de viviendas okupadas se ha incrementado: la Comunidad Valenciana, Extremadura y Murcia. De estas tres, sobresale la situación de la primera debido al volumen de casas okupadas y al porcentaje que aumenta entre 2021 y 2022. En total, la Comunidad Valenciana ha pasado de 1.027 okupaciones a 1.270, lo que supone un incremento del 23,66%. 

La provincia de Castellón es una de las grandes protagonistas en este aumento al registrar un 46,77% más de actividad. La capital, Valencia, también está por encima de la medida de la región al alcanzar un aumento del 24,43%.

Las otras dos comunidades en las que también han aumentado las okupaciones se quedan muy lejos de los datos registrados por la que ostenta el primer puesto. Extremadura ha obtenido un aumento del 5,43% (92 viviendas okupadas a 97) y Murcia un 3,52% (359 inmuebles okupados a 382).

Las provincias con menor y mayor variación

Teruel, Ourense y Palencia son las provincias que más han conseguido apaliar esta actividad ilegal. Según los datos,  (de tres  casas okupadas a una), lo que ayuda a que Aragón logre rebajar el número total en un 12%. Zamora se queda cerca con una caída del 60% al pasar de diez viviendas a cuatro. El podio lo completa Ourense, que logra desokupar ocho activos y dejar el número total en seis, con un descenso del 57,14%.

En el lado opuesto se encuentran Soria, Lugo y Cuenca. La primera ha sufrido un aumento del 200%, aunque el volumen es poco representativo: de una vivienda okupada a tres. Lugo registra otro alarmante crecimiento del 150%, pero su número total tampoco es preocupante: de seis casas a quince. Cuenca se queda en un aumento del 92,31% y pasa de 13 a 25 casas okupadas.