Dos mortíferos terremotos de magnitudes entre 7,8 y 7,6 golpearon este lunes el centro de Turquía y el noroeste de Siria, matando a miles de personas. Pero en medio de la debacle también hay motivos para sonreír, como el registrado por las cámaras en la ciudad siria de Azaz, donde los equipos de rescate lograron salvar de los escombros a una niña de corta edad herido bajo un edificio derrumbado.
Las múltiples sacudidas de la tierra han causado un balance de al menos 1.800 muertos y 7.800 heridos, cifras que son provisionales y previsiblemente seguirán aumentando porque hay miles de personas atrapadas bajo los escombros. Solo en Turquía se han cuantificado unos 2.800 edificios derribados.
Entre los numerosos vídeos que han comenzado a circular de la catástrofe ha destacado el compartido por la agencia Reuters en sus redes sociales de un pequeña niña de aparentemente dos o tres años que ha sido rescatado con vida en la ciudad siria de Azaz.
Otro vídeo sobrecogedor ha sido el que muestra el momento en el que un edificio colapsa en Sanliurfa (Turquía) a consecuencia de las múltiples y severas réplicas que siguieron al primero de los dos terremotos.
El terremoto con epicentro en Turquía ha provocado el derrumbe de al menos 2.800 edificios en Turquía y 405 construcciones en las zonas opositoras del noroeste de Siria, que escapan del control de Damasco, y donde hasta el momento se han recuperado más de 380 cadáveres, según grupo de rescatistas Cascos Blancos.
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