Los plazos de ejecución de las obras de los Ejes Verdes de L'Eixample se están cumpliendo, según confirmó la semana pasada el arquitecto jefe del Ajuntament de Barcelona, Xavier Matilla. En este momento, ya se ha iniciado un cambio de fase en diferentes tramos de las calles que se están transformando para empezar a preparar las condiciones para plantar la gran parte de la vegetación y el arbolado en estas vías. Hasta ahora los trabajos se han estado ejecutando en el lado mar de la calle Consell de Cent, y en el lado Llobregat de Rocafort, Comte Borrell y Girona, y se han centrado en la construcción de la plataforma única pavimentada. A lo largo de los próximos días se completará el cambio de lado para trabajar en la creación de los grandes parterres que acogerán vegetación y una nueva línea de arbolado.
Con el cambio de fase, se deja habilitado en todas las calles un carril de al menos 3,6 metros de ancho para la circulación de vehículos , en la zona central de la vía, que será la futura y definitiva zona de circulación para los vehículos que tengan permitido el acceso. Las afectaciones por las obras obligarán a ocupar la totalidad de los chaflanes y esto comportará que las actuales zona de carga y descarga y de zona azul dejen de estar operativas. Por este motivo, se permitirá la carga y descarga en los mismos tramos de obra. Los peatones contarán con franjas de paso de ancho suficiente, y la circulación de bicicletas seguirá estando garantizada.
En los tramos donde esta primera fase ha acabado, a falta de plantar la vegetación y el mobiliario urbano, ya se puede "intuir cuál será el aspecto definitivo de los ejes", explicó Xavier Matilla, ya que se han terminado todas las obras de demolición del antiguo pavimento y se han ejecutado los trabajos para instalar nuevas canalizaciones de aguas freáticas, las conducciones del alumbrado, telecomunicaciones y otros servicios, bajo la plataforma única.
Renovación de servicios
Con la ejecución de los ejes verdes, se ha renovado por completo la red de recogida de aguas, y se ha reordenado el sistema de alcantarillado con la reposición y ampliación de nuevos sumideros en ubicaciones compatibles con la nueva urbanización. El alumbrado de la vía también se ha renovado, y se han puesto unas farolas "a escala humana", según Xavier Matilla, con menos altura que las anteriores que estaban pensadas para una vía de circulación de coches.
Un cambio sustancial que se puede apreciar en esta plataforma única es el tamaño de los alcorques, los huecos dispuestos en el pavimento para albergar árboles y vegetación. Estos alcorques pasan de tener 1m2 a los 4m2, es decir, de tener un metro de lado a tener 2 metros.
Esta primera fase de las obras se ha completado con una base de hormigón donde se prevé el paso de vehículos, y la pavimentación con granito y panot de toda la plataforma única. Esta pavimentación combina diferentes tipos de panot, desde el típico con la "flor" de Barcelona, a otros con diferentes dibujos y texturas para que "las personas con capacidades diversas tengan una referencia visual y táctil" del cambio de funcionalidades de la vía, explicó el arquitecto jefe del Ajuntament, Xavier Matilla.
Grandes parterres
La segunda fase de obras, la correspondiente al lado contrario de la calle, consistirá en la creación de grandes alcorques, de hasta 6 metros de lado, con vegetación y árboles. Se retira todo el pavimento existente hasta dejar solo la tierra para ganar permeabilidad en el suelo. Entonces, se procede a la creación de los grandes parterres característicos de los ejes verdes. En estos espacios de vegetación habrá tanto arbustos como árboles, y según explicó el arquitecto jefe del Ajuntament de Barcelona, se buscará que haya una gran variedad de especies arbustivas y de árboles, al contrario que en muchas otras ocasiones que se ha abusado de una determinada especie.
El cambio de fase se realiza por tramos y de forma progresiva, en el sentido de la circulación, realizando cortes de tráfico intermitentes para poder desplazar las vallas de hormigón. Está previsto que los cortes callejeros no superen el par de horas. Se prevé que la intervención para modificar el ámbito de obras en los cuatro futuros ejes verdes dure durante todo el mes de enero. En total se actuará sobre 35 tramos de obra.
Adoquines y vías
En el momento de retirar el antiguo pavimento de las calles, y sobre todo al raspar el asfalto y eliminarlo, en muchas ocasiones quedan a la vista los antiguos adoquines que formaban las calzadas barcelonesas de hace años.
Los adoquines son retirados y se les corta la parte superior para eliminar la curvatura típica de este pavimento. De esta manera, se eliminan las irregularidades típicas de este tipo de pavimento. Las vías también se vuelven a instalar a la altura debida para que el pavimento sea totalmente liso y sea lo más accesible posible para todos los ciudadanos.
Finalmente se le da un tratamiento, denominado flameado, para que no resbalen, ya que al cortarlos pierden adherencia. Este proceso también se realiza para que los antiguos adoquines recuperen los colores variados propios del granito original con el que están fabricados.
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