Ahogados en la bañera, estrangulados en la cama, tropezones... y hasta por cortadora de césped: las maneras raras de morir en España

El sistema de la compañía puede conectarse a cortacéspedes comerciales.
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¿De qué morimos los españoles? En 2021, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), fueron las enfermedades del sistema circulatorio la primera causa de muerte, seguida de los tumores y de las enfermedades infecciosas, que incluyen la Covid-19 -casi 40.000 fallecidos en 2021, un 34% menos que en 2020-.

Esas son las muertes más comunes. Sin embargo, entre las 450.744 defunciones que tuvieron lugar en 2021 (43.032 menos que el año anterior) algunas fueron raras, o sea, poco frecuentes. Pero la Parca, a veces se nos olvida, puede presentarse en cualquier momento y circunstancia.

Se puede morir y se muere al caerse en la nieve o desde un árbol, por un sencillo tropezón en el lugar inadecuado o ahogado en la bañera. Algunas pueden parecer increíbles, pero nuestra fragilidad es seguramente mayor de lo que pensamos, rodeados como estamos de la red de seguridad que forman nuestras viviendas y nuestras ciudades, que -sin embargo- presentan al tiempo multitud de trampas.

Una persona murió por exceso de esfuerzo y otra víctima de un rayo

Sólo una persona falleció en 2021 por "exceso de esfuerzo". Era un varón de unos 50 años que sobrepasó los límites de su capacidad física y colapsó. Nos cuenta el INE que no fallecía nadie por esta causa desde 2017.

Aunque para extraño, casi bizarro, es morir víctima de una cortadora de césped a motor. Parece sólo posible en una película de terror de las malas, pero no. En 2021, en España una persona perdió la vida por esa causa.

Un usuario cambia una bombilla subido a una escalera.
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Y los rayos. Aún hay personas que mueren por su caída. En 2021, sólo un hombre falleció víctima de un rayo. Tenía algo más de 45 años. En 2021 nadie más perdió la vida por esa causa. Lo mismo pasó en 2020: sólo falleció una persona por la caída de un rayo y tenía esa misma edad. Por avalancha o derrumbe de tierra murieron dos personas.

No es tampoco habitual morir por contacto con animales y plantas venenosas. Pero pasa. En 2021, seis personas perecieron por esta causa. Avispas y abejas fueron la principal causa: cinco de las seis fallecieron por su picadura, esto es, por un shock anafiláctico.

Morir estrangulado en la cama

Solemos imaginar como "ideal" la muerte en la cama, mientras se duerme. Las necrológicas suelen decir aquello de "murió por causas naturales mientras dormía plácidamente". Parece algo ligero, sin aristas ni sufrimiento, como el paso de un dulce sueño a otro más prolongado. Pero morir en nuestra propia cama puede ser también enormemente trágico.

En 2021, ocho personas fallecieron por estrangulamiento accidental en la cama. Cinco eran hombres y tres mujeres. Sí, la muerte puede sobrevenir cuando nos enrollamos con las sábanas con demasiada fuerza alrededor del cuello. Podemos herirnos en la piel, dañar la laringe o la tráquea, las arterias del cuello... o morir. Apunta el INE que no fallecían tantas personas en España por esta causa desde, al menos, el año 2011.

17 personas fallecieron por frío natural excesivo y 35 por exceso de calor

Igual que siguen muriendo españoles por la caída de un rayo, también el frío sigue matando. En 2021, fallecieron 17 personas por frío natural excesivo (hipotermia). Es una más que en 2020. Y por calor. La estadística señala que murieron por calor natural excesivo 35 personas (cuatro menos).

En 2021, fallecieron aplastadas 27 personas, seis menos que el año anterior.

Hombre en una bañera, en una foto de archivo.
Hombre en una bañera, en una foto de archivo.
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Los inocentes tropezones mataron a 600 personas

Una mala caída también nos puede llevar al otro barrio. Si caemos en mala postura podemos lesionarnos, pero si caemos en la superficie equivocada podemos perder la vida. En 2021, según el INE, hubo tres muertes por caída por hielo o nieve (cinco menos que el año anterior).

Puede ocurrir y ocurre: tres personas murieron ahogadas en la bañera

También caer mal en el agua puede matarnos. Cuatro personas perdieron la vida por un traumatismo causado al saltar o zambullirse en el agua. Pero para improbable, morir ahogado en la bañera. Puede ocurrir y ocurre. Tres de las muertes de 2021 tuvieron lugar en una bañera.

Más comunes son las caídas desde un andamio. 25 personas se dejaron así la vida (siete menos que en 2020). Y aún más, los fallecimientos a causa de un inocente traspié o tropezón. Así, en 2021, murieron 600 personas, 107 más que en 2020. De ellas, 224 sucumbieron por caerse desde un árbol (213 más) y 393 al caerse de una escalera (25 más).

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