Qué hacer cuando nuestra perra está en celo: "Pueden ser más cariñosas y mostrar mayor desobediencia por búsqueda activa del macho"

Tres perros juegan, con uno boca arriba como táctica defensiva.
Tres perros juegan, con uno boca arriba como táctica defensiva.
Katrin B., Pixabay.
Tres perros juegan, con uno boca arriba como táctica defensiva.

Una de las etapas por las que muchos tutores caninos pasan es el celo de sus perras. Si tenemos una perra que no está esterilizada, tarde o temprano entrará en celo, con lo que eso conlleva. Para actuar adecuadamente debemos estar bien informados y preparados cuando llegue ese momento.

Lo primero que debemos saber son los signos que nos indicarán que nuestra perra ha empezado con el celo, para tener especial cuidado cuando salimos de paseo y juntamos a nuestro peludo con sus compañeros. "Se produce una secreción vaginal sanguinolenta y aumento de tamaño de la vulva por edema", explica Eva Gallo, veterinaria de la clínica AniCura Terán. "En ocasiones, puede existir marcaje con orina".

"En cuanto al comportamiento, pueden mostrar una conducta más cariñosa y, en determinados momentos, mayor desobediencia por búsqueda activa del macho", añade. "Esto está limitado a períodos cortos de tiempo, normalmente dos veces al año".

En el caso de los perros macho, Pedro Pablo Mayo, veterinario perteneciente a la plataforma EliteVeterinaria.org y experto en fertilidad canina, explica que "tienen deseo sexual y sienten atracción por las perras en celo". Es decir, no tienen un periodo concreto en el cual debamos tener cuidado, si no que siempre están dispuestos a la monta.

Al no tener un periodo definido, cuando un macho detecta a una hembra en celo (son capaces de hacerlo a mucha distancia), podemos notar algunos signos comunes como "el marcaje con orina del territorio, mayor agresividad hacia otros machos, un aumento de vocalizaciones o, a veces, la falta de apetito", añade la experta de las clínicas AniCura.

Pasos a seguir

Para cuando nuestras perras entran en celo, la veterinaria de AniCura recomienda "evitar la tendencia a escaparse y reforzar la obediencia". "Es importante saber reconocer cuando los síntomas no son los habituales para detectar enfermedades relacionadas con el sistema reproductor", aclara.

En cuanto a nuestra forma de actuar, en el caso de las hembras, "como son las que pueden traer la camada, hay que ser precavidos". "Si se está seguro de no querer tener cachorros se debe consultar en el centro veterinario cuáles son las posibilidades de esterilización que mejor se aplican en cada caso", detalla la experta.

"En machos, si los signos son muy severos, también se pueden esterilizar y, desde luego, es de suma importancia controlar tendencias escapistas para evitar montas no deseadas", insiste Gallo. 

Por otro lado, en cuanto al sangrado que se produce en las hembras durante la primera semana (y que puede durar hasta los 20 días), "hay que tomar medidas higiénicas si la perra convive con nosotros en casa", explica la veterinaria de AniCura.

Con las hembras tenemos hay que ser precavidos y con los machos hay que controlar las tendencias escapistas

"La duración del celo en hembras suele ser muy regular, de esta forma, ante la presencia de sangrados excesivos o muy leves, la prolongación en el tiempo o los celos demasiados cortos, hay que consultar al veterinario", aconseja. "De la misma manera, si una perra deja de tener el celo sin causa justificada, también es motivo de consulta".

Además, Gallo recuerda que no es recomendable cortar el celo, a excepción de haber motivo para ello y, siempre, bajo la supervisión veterinaria. Lo que sí se puede es evitar. "Existen soluciones definitivas basadas en cirugías y temporales, basadas en la esterilización química".

"Cada método de esterilización tiene ventajas e inconvenientes, por tanto, de nuevo, no dudemos en consultar a nuestro centro veterinario que será quién nos recomienda las mejores medidas para cada caso", concluye Gallo.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento