Este jueves 1 de diciembre, Telecinco emitió un nuevo capítulo de La isla de las tentaciones 5. Se trató del más explosivo de la edición, y prácticamente todos los y las participantes durmieron con sus tentaciones favoritas.

Entre ellos estuvieron Claudia y Álvaro. Ya en las anteriores entregas se pudo ver cómo la catalana se sentía cada vez más atraída por Álvaro. Sin embargo, hasta ahora esta siempre había optado por no caer en la tentación y respetar a su novio, Javi.

Esto cambió en el último capítulo: tras hablar mucho con Álvaro y darse besos en el cuello, llegó un momento en el que Claudia le pidió que se alejaran en una fiesta con la clara intención de darle un beso.

Así, se retiraron a una de las tumbonas que estaban junto a la piscina y, tras una breve conversación y arrumacos, terminaron besándose. En Villa Paraíso, el novio de Claudia intuyó rápidamente lo que había pasado al ver cómo se encendía la que creía que era su alarma. 

El catalán estaba alerta después de que, poco antes, tuviese la oportunidad de ver en directo a Álvaro y a su novia, y ambos conversaban en la cama sobre lo mucho que se gustaban.

Tras el beso, Claudia y Álvaro optaron por dormir juntos. Al día siguiente, y aunque la influencer no se mostró arrepentida, sí que dijo que no lo había hecho bien y que debería haber hablado con su todavía novio antes de hacer nada. 

En esa línea, no pudo evitar venirse abajo al llegar a la hoguera y ver cómo estaba sufriendo Javi, aseguró que era la primera vez que era infiel y lamentó haberse decepcionado a sí misma, pues la deslealtad no estaba entre sus valores.

"Soy una persona a la que le gusta estar feliz y encontrar el lado positivo de las cosas. He intentado que Javi vuelva a ser quien es, pero es que no puedo. Me duele tanto... porque le quiero tantísimo, y vengo y hago esto. Es que lo voy a matar, porque Javi me quiere por encima de todo, da su vida por mí. Y yo voy y hago esto, no se lo merece", dijo, entre lágrimas.