El candidato popular a presidir la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, ha denunciado que su territorio sufre un "procés silencioso" en manos de la Generalitat de Ximo Puig, dado que está aplicando medidas que "se parecen mucho a la agenda catalana independentista".  Así, por ejemplo, ha citado que "el presidente de la Generalitat valenciana ha sido el primero en saludar los indultos a independentistas, el primero en saludar la eliminación del delito de sedición, mientras otros barones socialistas han mostrado dudas".

También ha hecho referencia a "la oficina del espionaje lingüístico", lo que, para Mazón, es "una copia de la oficina catalanoide independentista" que tuvo que "parar el PP en los tribunales y ahora han decidido meterla en la ley de acompañamiento de los Presupuestos de la Generalitat".

En este sentido, desde la oposición, el popular ha prometido aplicar en la Comunidad Valenciana la fórmula de su líder de partido: el "bilingüismo cordial". "Quiero deshacer el requisito lingüístico y hacer la ley de libertad educativa", ha avanzado en un desayuno informativo en Madrid organizado por Nueva Economía Fórum. 

Es más, haría que la obligatoriedad de hablar valenciano excediera de las aulas y se retire también de otros sectores, como el de la Sanidad. "Si tiene que haber profesores de valenciano es lógico que se le pida el requisito del valenciano, pero para operar una catarata no es necesario. Es simbólico que el valenciano valga tres veces mas que un doctorado, las oportunidades que nos estamos perdiendo", ha explicado.

Asimismo, ha amplificado la crisis sanitaria a su comunidad donde, asegura, hay más espera que en Madrid, donde hace dos semanas se produjo la primera gran concentración para protestar por las deficiencias del servicio público. Pues si un madrileño ha de esperar 71 días para una intervención quirúrgica, los valencianos deben esperar, de media, 108 días, según los datos del candidato popular.

A la exigencia de que la sanidad pública mejore Mazón pide también un plan fiscal en el que desaparezca el impuesto de sucesiones, así como, que el impuesto de la vivienda sea progresivo. Una batería de medidas con las que el ahora líder de la oposición aspira a convertir la Comunidad Valenciana en "locomotora y no furgón de cola". Pues, según el popular, en los últimos años la Comunidad Valenciana ha pasado del tercer al cuarto puesto en el PIB en la clasificación de autonomías, ha aumentado la brecha social, ha disparado los datos de pobreza, se ha convertido en líder de paro juvenil y de presión fiscal; se han duplicado las listas de espera sanitaria y han colapsado los servicios sociales y la vivienda social".

Carlos Mazón ha mostrado su optimismo por ganar las elecciones el próximo mes de mayo. Porque "la Comunidad Valenciana es la primera que se enfrenta a unas elecciones donde el presidente del gobierno no va por delante de las encuestas", ha asegurado esta mañana. En este contexto, Mazón ha vuelto a declarar su intención de gobernar en solitario, es decir, sin Vox. "No voy a renunciar a mi europeismo ni carácter moderado", ha dicho en referencia a la formación de Abascal.

Así lo ha defendido frente a la plana de su partido, que este lunes le ha arropado en un acto al que solo se han ausentado el presidente de Andalucía, Juanma Moreno, y el de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda. El líder del PP ha presumido de la foto de familia al inicio del acto. "En España hay partidos como el PSOE donde sus dirigentes autonómicos rehúyen a sus líderes nacionales y evitan hacerse fotos con ellos como hemos visto en la Internacional Socialista", ha señalado Alberto Núñez Feijóo.

"Para el PP no es excepcional que los líderes autonómicos acudan de forma conjunta a los actos e incluso que le pidan a su presidente que les presente en los foros más trascendentes", ha continuado Feijóo rodeado a la mayoría de sus barones.