El Presupuesto del Ayuntamiento de València crecerá un 3,16% en 2023, hasta los 1.043 millones de euros (supera por segunda vez consecutiva los mil millones) en un contexto económico "delicado y preocupante" por la inflación y la crisis energética, según ha afirmado este lunes en la presentación del documento el alcalde, Joan Ribó. Con los impuestos congelados, el Gobierno local afirma que mantendrá el ritmo inversor "sin recortes". Residuos y limpieza, EMT y Bienestar Social son las partidas que encabezan el gasto corriente, mientras en inversiones destacan un depósito de tormentas en el Saler, actuaciones en centros escolares, la nave del Parque Central destinada a uso deportivo, el Palau de la Música y el cuerpo municipal de Bomberos. 

En el proyecto, aprobado este lunes en Junta de Gobierno y que pasará por el pleno para ser validado inicialmente este viernes, figura por primera vez una partida de 31,4 millones de euros para el Canal de Acceso Ferroviario (la parte del soterramiento que paga el Consistorio, el 25% de los 550 millones en total). Ribó, de Compromís, ha presentado las líneas básicas del Presupuesto junto al concejal de Hacienda, el socialista Borja Sanjuán, en lo que supone el octavo proyecto del gobierno de coalición de izquierdas.

Respecto a la deuda, el Ayuntamiento prevé que se sitúe en 230 millones de euros a finales de 2023, un 70% menos respecto a los 750 millones "heredados" a mediados de 2015. Eso sí, el Gobierno municipal recurrirá a nuevos créditos por importe de 35 millones de euros, que compensará al amortizar 37 millones de préstamos anteriores durante el ejercicio 2023, lo que supondrá una reducción neta de 2 millones de euros.

Los gastos corrientes en bienes y servicios y transferencias aumentan un 6,4%, en 30,4 millones, para atender la subida del precio de la energía, pagar el nuevo tributo estatal por la gestión de residuos (que asume el Ayuntamiento) y el nuevo contrato de zoonosis dirigido a la lucha contra las plagas. Las áreas que destacan en gasto corriente son Residuos y Limpieza con 86 millones (nuevo impuesto estatal de residuos y mejora limpieza viaria), Servicios Centrales Técnicos con 58,4 millones (incremento energía eléctrica y contrato servicios postales) y Bienestar Social con 42,3 millones (mejora de atención social primaria). Además, la EMT recibirá 76 millones de euros del Ayuntamiento, además de una partida extraordinaria de 11,3 millones, para hacer frente al alza de precios de los combustibles y a las pérdidas por la pandemia.

Las Cuentas estarán marcadas, además, por el incremento del coste de la deuda debido al alza de los tipos de interés. Sin embargo, también reflejan un crecimiento de los ingresos que se debe no a una mayor presión fiscal, sino al aumento de transferencias del Estado, de la Generalitat y de los fondos europeos Next Generation, con una anualidad de 35 millones de euros para 2023. 

En este último capítulo se incluyen inversiones con fondos comunitarios de 14,5 millones de euros relacionadas con la movilidad como la futura Zona de Bajas Emisiones, la supermanzana de Orriols, la accesibilidad a las paradas de la EMT, y la digitalización y compra de autobuses; 5,2 millones para la mejora de la sostenibilidad turística; 4,6 millones para ciberseguridad y proyectos de Smart City y 2,4 millones de euros para la instalación de puntos de recarga para vehículos eléctricos y placas solares en mercados municipales.

Las inversiones reales del Ayuntamiento ascenderán a 135 millones de euros, donde destacan los 16 millones de euros para el depósito de tormentas del Saler y obras de la red de aguas, 5,8 millones para tres colegios públicos (CEIP 106 Malilla, Carles Salvador y San José de Calasanz) y 5,2 millones para la nave deportiva del Parque Central, además de otras inversiones en Bomberos, Palacio de Congresos, Devesa-Albufera o mercados municipales.

A estas actuaciones, el Consistorio añade los 150 millones de euros pendientes de ejecutar del Presupuesto de 2022. "Es decir, que las inversiones totales para 2023 alcanzarán los 287 millones de euros, a falta de la liquidación de 2022, lo que supone una de las cifras más altas de la historia del Ayuntamiento de València", ha afirmado Sanjuán. El alcalde, Joan Ribó, ha concluido asegurando que mantener el esfuerzo inversor "es una de las prioridades del Gobierno municipal para continuar mejorando nuestros barrios y pueblos y favorecer la actividad económica".

Catalá los tacha de "insensibles" y denuncia áreas olvidadas

La portavoz del PP en el Ayuntamiento, María José Catalá, ha calificado los presupuestos municipales presentados este lunes por el Gobierno municipal de "insensibles" y con áreas olvidadas que sufren una disminución de gasto, como es el caso de Policía Local (-10%), vivienda (-34%), en comercio (-35%) y en jardinería sostenible (-3%), emergencia climática y envejecimiento activo (-11%)

"Ribó termina hoy un ciclo con unos presupuestos que vuelven a nacer de espaldas a la difícil situación económica que vivimos. Es incomprensible que en 8 años Compromís y PSOE se hayan negado sistemáticamente a bajar impuestos mientras los vecinos no pueden hacer frente a las facturas", ha lamentado Catalá, quien ha advertido del "afán recaudatorio" de Compromís y PSPV: "La recaudación por impuestos y tasas aumenta y llega a los 502 millones de euros, destacando el aumento del 25% en la recaudación de multas", ha añadido.