Recibir chistes de contenido sexual, peticiones reiteradas de citas, insinuaciones, abrazos y besos no deseados, acorralamientos o incluso asaltos sexuales. Son solo algunas de las formas en las que se manifiesta el acoso sexual en el trabajo, una lacra más extendida de lo que se conoce, pero que permanece invisibilizada la mayoría de las veces, ya sea porque los casos caen en saco roto o porque las propias víctimas evitan denunciar ante el temor a las represalias. 

Conscientes de esta situación, CC OO ha puesto en marcha un Observatorio de Acoso Sexual y por Razón de Sexo, que nace con la aspiración de convertirse en una "ventana" para las víctimas, pero también como un repositorio de buenas prácticas, dudas, información jurídica e investigaciones. Se trata, según ha puntualizado la secretaria confederal de Mujeres, Igualdad y Condiciones Obreras, Carolina Vidal, en un encuentro con los medios, de una herramienta para "fortalecer y hacer efectivo el cordón sanitario en torno a las víctimas".

Vidal, que ha apelado a la colaboración de las patronales y de las administraciones para que el proyecto dé sus frutos cuanto antes, ha incidido en uno de los gérmenes de la invisibilidad del acoso sexual en el ámbito laboral: la violencia dentro de las empresas se tolera mucho más que en la calle. "Desnaturalizar un comportamiento acosador nos va a costar mucho trabajo", ha reconocido. 

Una "ventana" para las víctimas

Pese a que desde el sindicato han hecho hincapié en la carencia de datos e investigaciones que permitan obtener una aproximación de la magnitud de esta lacra que consideran "estructural", han arrojado luz sobre algunas cifras disponibles. El 40,4% de las mujeres (unos ocho millones) ha sufrido acoso en algún momento de su vida (dos millones en el último año) y el 17,3% lo ha padecido en el trabajo, según la última Macroencuesta de Violencia contra las Mujeres. "Las trabajadoras deben sentir que cuentan con una ventana a través de la cual gritar que están sufriendo este tipo de violencia y sentir que alguien les escucha, orienta sobre cómo actuar, las refuerza y ayuda", inciden desde el sindicato. 

El problema es que hasta ahora se han puesto en el mismo saco todos los tipos de acoso sexual, sin especificar las particularidades del mismo (jerarquías de poder, revictimización, exposición de la vida privada, vergüenza,  miedo a las represalias, etc.). Por ello CC OO incide en la necesidad de recopilar la información "por separado", pues el acoso sexual en el trabajo tiene unas características muy marcadas y requiere de protocolos específicos.

Recuerda también el sindicato que desde que entró en vigor la ley del 'solo sí es sí' el acoso sexual en el trabajo está tipificado también como una forma de violencia machista, por lo que los agresores pueden enfrentarse desde octubre a consecuencias penales, y las víctimas, por otro lado, tienen acceso a medidas de protección muy importantes, como una orden de alejamiento.

Una web segura con salida rápida

En definitiva, la página web, que estará operativa desde esta tarde, pretende crear un espacio en el que se recoja información periódica sobre esta problemática y ofrezca la ayuda de una red de expertas de varios ámbitos (académico, jurídico, psicológico, etc.) para buscar la raíz y la solución del problema a través de un formulario. Esto último se hará mediante un buzón abierto en el que, más que un mero mecanismo de denuncia, servirá como un sistema de detección y, en definitiva, como una "mano abierta" a todas las mujeres acosadas en las empresas. 

Con los casos que se vayan recopilando se irá creando una base de datos de referencia, con indicadores y criterios de coordinación. Además, la web pone a disposición de la ciudadanía un compendio de todas las legislaciones y modelos de protocolos de acoso para las 90.000 personas delegadas que existen ahora mismo.

Además, esta iniciativa "pionera" está pensada igualmente para orientar a las personas que tengan dudas sobre cómo actuar ante casos de acoso, algo "especialmente" necesario para las pequeñas empresas o las personas que trabajan solas en hogares, como las empleadas de hogar o las asistentes de ayuda a domicilio, que suelen estar más desprotegidas en ese sentido. 

Asimismo, se trata de una "web segura", según recalcan desde Comisiones Obreras. Y es que la página cuenta con la opción de "salida rápida" por si las personas quieren consultarlo desde el propio puesto de trabajo. "Hay que trabajar para que los protocolos no sean un obstáculo burocrático en la denuncia, sino una herramienta", ha reivindicado la secretaria de mujeres del sindicato.