
Hace cinco meses que Ivana Icardi decidió pasar por quirófano para someterse a una rinoplastia. Aunque parecía que podría ser por un tema estético, lo cierto es que tuvo más que ver con salud. Y así lo vuelve a confirmar la última revisión médica a la que ha acudido.
En ella, a la exconcursante de Supervivientes se le ha diagnosticado un problema de salud crónica que tiene que ver también con la funcionalidad de su nariz, que se ha visto afectada por los "golpes y codazos" que recibió durante su etapa como jugadora profesional de baloncesto.
Ahora Ivana Icardi ya conoce el motivo por el que venía quejándose de unas molestias. "Estaba un poquito preocupada porque la principal razón por la que me operé fue funcional y sentía que no estaba respirando mejor en este último tiempo. En mi cabeza pensaba: a quirófano de nuevo", ha dicho.

Lo cierto es que la joven de 27 años tiene "los cornetes superhinchados y rojos" por el cambio de estación. Aunque parezca algo normal en la época en la que estamos, la realidad es que se trata de un problema de salud real.
"Es crónico, así que me toca lidiar con sprays nasales", ha lamentado Icardi. Esta nueva afección demuestra una vez más que no ha pasado por quirófano para mejorar su imagen, aunque haya sido uno de las consecuencias también, sino para mejorar su respiración.
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