Un hombre de 45 años ha sumado a su imputación como presunto autor de un atraco en una estación de servicio de Zaragoza otra por agresión sexual, ya que antes de emprender la huida abrazó y besó a la empleada a la que había amenazado con un cuchillo.

La detención de esta persona y de los dos cómplices que le esperaban en las inmediaciones del establecimiento se produjo sobre las 14.30 horas del pasado domingo, minutos después de que se llevara a cabo el asalto en la gasolinera, según informa la Dirección General de la Policía.

Estas fuentes señalan que la empleada que se encontraba en esos momentos al frente de la estación fue sorprendida por un hombre que le mostró un cuchillo antes de instarle a que le entregara el dinero que había en la caja. Intimidada por el arma, la mujer abrió la caja y el atracador cogió billetes y monedas por un importe aproximado de unos quinientos euros.

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Tras apoderarse del botín, el sospechoso abrazó a la empleada y le dio un beso en la mejilla y salió del establecimiento al tiempo que se metía todo el dinero en los bolsillos.

La acción fue vista por un testigo que decidió llamar a la policía al parecerle sospechosos sus movimientos. Informó, además, de que a unos pocos metros de la estación el presunto atracador, de 45 años, se reunió con otros dos hombres, de 35 y 36 años, que fueron localizados y detenidos unos minutos después por los agentes desplazados a la zona.

Tras prestar declaración por estos hechos, el presunto autor material del atraco ingresó en prisión como presunto autor de un delito de robo con violencia y otro por agresión sexual relacionado con el abrazo y el beso que le dio a empleada de la gasolinera antes de huir.

Los otros dos detenidos fueron puestos en libertad con cargos como presuntos coautores del robo con intimidación perpetrado.