El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este jueves la creación de una nueva tarifa regulada para las comunidades de vecinos con calderas centralizadas de gas natural con el fin de limitar hasta finales de 2023 el incremento de los precios. La medida, según los cálculos del Ejecutivo, permitirá reducir "a más de la mitad" la factura de 1,7 millones de hogares. Esta medida irá incluida en un nuevo paquete de medidas que el Consejo de Ministros aprobará el próximo martes que conllevará la movilización de 3.000 millones de euros y que "protegerá" al 40% de los hogares españoles.
Además de la creación de la nueva tarifa regulada, también se reforzará el bono social eléctrico para los más de 1,3 millones de hogares que ya disfrutan de él. En concreto, se aumentará el descuento aplicado hasta el 65% para los beneficiarios "vulnerables" y el 80%, para los "vulnerables severos". También se elevará un 15% la cantidad de energía con derecho a descuento .
El Gobierno creará una nueva categoría de consumidores para aquellos hogares con ingresos reducidos -cuya horquilla no ha sido concretada aún-. Estas familias, unas 1,5 millones según el Ejecutivo, podrán beneficiarse de un descuento del 40% en la factura eléctrica. Asimismo, durante este año y el próximo se duplicará el presupuesto del bono para hogares vulnerables, doblando la ayuda media hasta los 375 euros por hogar y elevando la ayuda mínima a 40 euros.
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ya avanzó el martes que el Ejecutivo estudiaba "más rebajas fiscales", "más protección a los consumidores", particularmente a los más vulnerables, pero no solo, y "más protección a las comunidades de vecinos" para "rebajar la factura de 1,6 millones de hogares" que tuvieran calderas comunitarias.
"Los equipos técnicos trabajan para ver la mejor forma de resolver la cuestión de las calderas de comunidades de propietarios, que representan en torno a 1,6 millones de familias pueden ver cómo su factura energética este invierno crece exponencialmente", señaló entonces Ribera en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, guardándole al presidente el anuncio para este jueves.
Todas estas medidas son parte del plan energético de contingencia que aprobó el Gobierno el pasado martes y que recoge diversas recomendaciones para ahorrar energía. El Ejecutivo calcula que las medidas de racionalización del consumo en la Administración pública y en empresas y hogares o con el despliegue de energías renovables para sustituir las energías fósiles se puede reducir el consumo nacional de gas entre un 5,1% y el 13,5%.
La vicepresidenta indicó que desde que se aprobó en agosto el primer plan de contingencia el consumo de gas ha caído un 4,6% y ha traído aparejado un 3,4% el de electricidad. El extremo inferior de la horquilla de ahorro adicional que se busca con este segundo plan está por debajo del recorte que sería obligado para España en caso de que en la UE se declarase una situación de alarma -el 7%-, pero fuentes del Gobierno aducían que España llega ya al ahorro genérico del 15% que se pactó en la UE porque en los últimos meses ya ha reducido en un 14% su consumo de gas.
Con todo, el plan se compone de 73 medidas en seis bloques y de recomendaciones para administraciones y hogares. Para estos últimos se dirigirá también una campaña de comunicación y esfuerzos más específicos para que, por ejemplo, sean los arquitectos quienes a la hora de acometer una reforma recomienden las alternativas más eficientes o para que la publicidad en los grandes almacenes informen de las ventajas energéticas de unos modelos de electrodomésticos sobre otros.
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