Tomando la palabra en asturiano, el presidente ha lamentado durante su intervención en el parlamento autonómico que la "aritmética parlamentaria" haya impedido llegar a un acuerdo para reformar el Estatuto de Autonomía e introducir la oficialidad del asturiano y el gallego-asturiano en esta legislatura.

"Asumo este revés como un fracaso colectivo, como una oportunidad perdida que solo va a tener solución si los grupos partidarios de la oficialidad reúnen al menos 27 escaños en la legislatura que viene", ha dicho.

Barbón ha ligado la oficialidad del asturiano al "fomento del orgullo de pertenencia", un propósito en el que, asegura, lleva trabajando desde el inicio de la legislatura. "Los asturianos tienen hoy más orgullo de pertenencia, y probablemente en ello haya influido de forma decisiva la respuesta colectiva a la pandemia", ha razonado.

En este punto ha puesto en valor también la conmemoración de los 1.300 años de la Batalla de Covadonga, o la recuperación de la efeméride del 25 de mayo de 1808, así como la celebración de los 40 años del Estatuto de Autonomía.

Al objetivo de recuperar la autoestima, ha agregado, se ha sumado la Consejería de Cultura, Política Llingüística y Turismo, con medidas de difusión del Prerrománico, el plan de hórreos y paneras, el proyecto del Camín de Santuarios compartido con Cantabria, o la elección de la cultura sidrera como candidatura a patrimonio mundial de la Unesco. Todo ello, ha subrayado Barbón, "ha contribuido a revalorizar nuestra identidad".