Hasta 140 famosos podrían haber sido víctimas por los supuestos delitos que investiga la llamada Operación Luna, conocida popularmente como Operación Deluxe y por la que Sálvame y su productora, La Fábrica de la Tele, están siendo investigados.

Según las pesquisas, se habría cometido un delito de revelación de secretos por la filtración de datos privados por parte un policía a Gustavo González, paparazzi y colaborador habitual del programa de Telecinco, aunque otras personas del entorno de Mediaset, como redactores del programa, responsables de la productora y colaboradores de Sálvame. 

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Entre las posibles víctimas de esa trama de espionaje a famosos, políticos y artistas, está el humorista Ángel Garó, que en una entrevista a La Razón aseguró que se ha personado como acusación particular. 

"Me enteré de que me habían investigado desde la productora, a mí y a mi familia, a mis padres... y les puse una demanda, al igual que han hecho otros muchos personajes populares", decía Garó. 

"Esa cadena de televisión se va a enterar", avanzaba el humorista, que aseguraba que en la cadena "el secretismo y el silencio sobre el escándalo es total. Puro hermetismo".

A Ángel Garó, que participó en realities y como colaborador en programas de Mediaset, no le da ningún reparo denunciar. "Ellos se lo han buscado. Es una vergüenza su forma de actuar, se merecen una sentencia ejemplarizante que sirva para evitar futuras actuaciones similares".

La fábrica de la tele, productora de las distintas versiones de Sálvame, emitió un comunicado cuando salió a la luz la operación en el que aseguraban que "ningún director o redactor del programa Sálvame ha tenido nunca ninguna relación con el agente de policía investigado en las actuaciones judiciales".