Vivir la trashumancia tras superar el cáncer: adolescentes que "saben apreciar lo que de verdad importa" entre perros y pastores

  • "Ves a los pastores que pasan tres meses en las montañas y valoras lo que tienes".
  • Esta iniciativa tiene como objetivo poner en valor el mundo de la ganadería extensiva y la labor de los perros pastores.
Vivir la trashumancia tras superar el cáncer
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Vivir la trashumancia tras superar el cáncer

Caminar en plena naturaleza durante 10 días, mientras conocen la importancia de la trashumancia, sus rebaños protegidos por perros y el amplio anecdotario de sus pastores. Así es Aventura Trashumante, una iniciativa inmersiva que adentra, por las travesías más montañosas de León, a 20 jóvenes de entre 13 y 17 años que han superado un cáncer.

La Cueta (León), un pueblo de 9 habitantes, es la sede principal de esta aventura por la sierra de Babia acompañando a diferentes pastores de la provincia en su actividad, recorriendo 100 kilómetros durante los días que dure la experiencia. Esta tierra es la ruta elegida, desde hace siglos, por muchos pastores trashumantes para realizar este tipo de ganadería extensiva.

Felipe, de 17 años, lleva caminando desde el 1 de agosto. El 10 de enero de 2018 le diagnosticaron un Linfoma no Hodgkin de células T y su vida cambió por completo. Dos años después, el 20 de enero de 2020 terminó con el tratamiento: "Es una experiencia muy bonita, en la que estoy aprendiendo mucho, no solo de la naturaleza, también de la vida. Ves a los pastores que pasan tres meses en las montañas y te das cuentas de lo que tienes y valoras las cosas que tienes".

Aprendes mucho, no solo de la naturaleza, también de la vida

A Laura, de 15 años, en el año 2016 le diagnosticaron cáncer de pierna. Su vida cambió, el tratamiento fue complicado y con este programa quiere "sumar experiencias y aventuras a mi vida y concienciarme más del cambio climático".

Manuel Calvo, responsable del proyecto, lleva años trabajando con jóvenes como ellos y cuenta que tienen algo especial. "Saben apreciar lo que de verdad importa en la vida. Han pasado procesos complejos y esos momentos te hacen valorar los pequeños detalles de la vida", explica.

Entre rebaños, perros y pastores 

Calvo explica que quería llevarlos a la zona para que vivieran en primera persona esta experiencia en declive. "Es muy distinto que tú en un curso de formación o en un aula cuentes cómo viven estos pastores", dice.

En un inicio, el objetivo principal del proyecto era mostrar la importancia del mastín en la trashumancia. "En las zonas donde vienen a pastar en verano hay muchos lobos, osos también, y los mastines son los grandes protectores de los rebaños de más de mil cabezas", cuenta Manuel Calvo.

Pero alrededor de esta actividad surgen distintos valores que quieren inculcar a estos jóvenes: "El respeto medioambiental, que vean por ejemplo que estos rebaños son los mejores bomberos, donde pastan no se producen incendios. También que conozcan las condiciones de vida de los pastores, que son muy duras", afirma el responsable de Aventura Trashumante.

Día a día viviendo con unos recursos mínimos, acampando y recorriendo duros kilómetros cada día, con pastores como Ismael, de 72 años y ya jubilado, contándoles historias de mastines y de lobos, viendo pastar a las ovejas y tomando las comidas típicas como las sopas de ajo

Para los participantes, es una vida muy distinta a la que suelen desarrollar en sus ciudades de origen. Felipe, malagueño, cuenta que intenta aprender de los pastores y trasmitir a sus familiares y amigos la riqueza que tiene la naturaleza en España, así como la necesidad de cuidarla.

A Laura, esta aventura le ha hecho concienciarse más acerca del cambio climático. "Visitamos un pantano que el pastor nos dijo que hace años era mucho más grande. La gente de la ciudad no se da cuenta del cambio que está teniendo el medio ambiente", dice. 

Pero no todo es trabajar, el relax también entra dentro de sus planes. Para combatir el sofocante calor, las piscinas naturales de la sierra leonesa son un oasis para relajarse mientras siguen en contacto con la naturaleza y practican cómo reducir su impacto medioambiental

La reutilización de los materiales de ediciones anteriores así como no utilizar plásticos son dos de las prácticas responsables que inculcan desde Aventura Trashumante a estos jóvenes. "Que nuestra huella de carbono sea la mínima posible, que las únicas huellas sean las de nuestras botas en los senderos de Babia", dice Manuel Calvo.

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