Agentes de la Policía Nacional han detenido al portero de un local de la zona de ocio nocturno del puerto de Alicante que golpeó a un hombre que causaba problemas a los clientes en el interior del establecimiento.

Además, en el momento de su detención, el portero llevaba encima varias armas prohibidas, como una navaja tipo mariposa de 23 centímetros de longitud, un puño americano envuelto en cinta aislante, un cuerno de marfil afilado, unos grilletes con su llave y un grillete de dedos, han indicado las fuerzas y cuerpos de seguridad en un comunicado.

Esta detención se enmarca dentro de la operación Plan Verano, de prevención de la Seguridad Ciudadana, en este caso en cuanto al control de establecimientos de ocio nocturno en las distintas zonas de ocio de la ciudad.

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Tras recibir una llamada a la Sala CIMACC del 091 que alertaba de una pelea en la zona de ocio del puerto de Alicante, una dotación de la Brigada de Seguridad Ciudadana de Alicante acudió al local donde supuestamente se desarrollaban los hecho.

A su paso por una avenida cercana al establecimiento, los agentes se encontraron con dos hombres que iban corriendo. Uno de ellos tenía la ropa manchada de sangre, motivo por el que les interceptaron ante la posibilidad de que pudieran estar involucrados en el suceso.

Uno de los dos hombres manifestó que había sido agredido por un portero de un establecimiento de ocio del puerto, quien además le había pinchado con una navaja. Ante tales manifestaciones, la dotación policial requirió una dotación sanitaria para que atendiesen al hombre lesionado y se dirigió a la zona del suceso donde localizaron al presunto agresor.

Al parecer, el herido, junto con otro hombre, estaban causando molestias a los clientes del establecimiento, por lo que el portero del local intervino. Así, cogió del cuello por detrás a uno de ellos para inmovilizarle mediante la técnica del 'mataleón', lo que dejó al hombre inconsciente para poder sacarlo fuera del establecimiento.

Cuando el individuo recuperó la conciencia, se lanzó contra el portero de un modo "agresivo y hostil" con intención de agredirle. Este, según manifestó posteriormente, se vio en la necesidad de defenderse "dado el elevado estado de agresividad".

A continuación, la unidad sanitaria que atendió al varón agredido, tras una primera valoración, determinó que presentaba contusiones y heridas de arma blanca, por lo que requirió puntos de sutura en cabeza, mentón y rodilla derecha y fue trasladado al Hospital General para segunda atención.

Los agentes detuvieron al portero como presunto autor de un delito de lesiones graves. En el momento de su detención, los policías descubrieron que el arrestado llevaba encima varias armas prohibidas, que le fueron intervenidas.

El detenido, de 31 años de edad y de nacionalidad española, fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de la misma localidad.