La polémica es algo en lo que Marina Yers se suele mover, pues la voz que le dan las redes sociales hace que en muchas ocasiones se viralicen algunas de sus controvertidas opiniones, muchas de ellas tachadas de bulos. Pero, además, cuando son sobre la salud, las críticas son mayores por lo peligrosas que pueden ser según qué afirmaciones.

La joven de origen ucraniano ha llegado a decir que "el agua deshidrata más que hidrata", que es negacionista -aunque luego aseguró que lo dijo de broma para concienciar a la gente-, que "las mascarillas tienen larvas", que le "encanta vomitar" porque siente que se limpia por dentro o que beber ayahuasca puede ayudar a personas con autismo.

Ahora, la influencer de 22 años, que tiene casi dos millones de suscriptores en YouTube y 1,3 millones en Instagram, se ha pronunciado sobre el cáncer en una 'ronda de preguntas y respuestas', donde uno de sus seguidores le preguntó qué haría si tuviera esa enfermedad.

"A día de hoy, con todo lo que sé, consultar alternativas diferentes como ir al Amazonas y curarme con tratamientos de x plantas específicas", respondió este jueves Marina Yers en sus stories. "Sé que a muchos les suena a locura, pero tengo testimonios de gente que se ha curado allí, en el pulmón del mundo".

Rápidamente, las redes reaccionaron y la criticaron por sus palabras que, de nuevo, eran "un peligro para la salud pública", tal y como opinó la también youtuber Gata de Schrödinger.

Marina Yers, criticada por promocionar en sus redes sociales los ritos con ayahuasca y el uso de veneno para curar enfermedades

Pero, de hecho, no es la primera vez que la influencer ucraniana habla del Amazonas, pues ya en el mes de abril fue criticada tras asegurar que había viajado hasta allí para tratarse una enfermedad hepática con kambó, una secreción procedente de una rana venenosa, algo que le habría costado unos 60.000 curarse con medicina tradicional.