Dos orcas están aniquilando a grandes tiburones blancos en Sudáfrica: encuentran a varios completamente destrozados

Un tiburón blanco tras el ataque de una orca en Sudáfrica.
Un tiburón blanco tras el ataque de una orca en Sudáfrica.
DYER ISLAND CONSERVATION TRUST
Un tiburón blanco tras el ataque de una orca en Sudáfrica.

Varios tiburones blancos han aparecido muertos en las costas sudafricanas desde el año 2017 como consecuencia del brutal ataque de dos orcas, que están consiguiendo espantar a los ejemplares de esta especie de tiburón de la región de Gansbaai, lo que está alterando el ecosistema marino, según un estudio publicado esta semana en la revista African Journal of Marine Science.

Los cuerpos de un total de ocho tiburones han sido hallados en estos cinco años. Siete de ellos no tenían el hígado, y a algunos también les faltaba el corazón. Fueron víctimas de dos orcas, nombradas como Port y Starboard. Desde entonces, más ataques se han sucedido y más cadáveres han aparecido con graves consecuencias para el hábitat marino, recoge The Washington Post.

Fue en ese mismo año cuando los científicos iniciaron una investigación para analizar el comportamiento de las orcas y los efectos en los tiburones blancos, y encontraron que la presencia de los segundos se redujo considerablemente después de los ataques.

Tras realizar el seguimiento de 14 tiburones que habitaban las aguas sudafricanas, han determinado que antes de las agresiones podían llegar a verse hasta siete ejemplares, mientras que el número se redujo a 1,7 tras ellas en el mismo año

En los dos años siguientes nunca llegó a alcanzar el par de avistamientos al día, por lo que la conclusión de los investigadores es que las orcas habían generado pánico entre los tiburones, que comenzaron a huir de ellas.

La autora principal del estudio, la bióloga marina del Dyer Island Conservation Trust Alison Towner, ha explicado en una nota emitida por la organización que al principio, tras el ataque de una orca "los grandes tiburones blancos no aparecían durante semanas o meses", pero lo que está ocurriendo ahora parece ser "una estrategia de evasión a gran escala"

Además, Towner ha incidido en que la desaparición de los tiburones blancos podría desembocar en la que "depredadores más pequeños dominen", lo que a su vez podría generar que el colapso del ecosistema o "de algunas de las especies que pertenecen a él".

Así pues, la ausencia de los depredadores principales ya ha provocado la llegada de "un nuevo mesopredador en la zona, el tiburón ballenero de bronce", y podría provocar también que las focas modificasen su comportamiento, lo que afectaría directamente sobre los pingüinos africanos, una especie en peligro de extinción, ya que "pueden depredarlos o competir por los pequeños peces pelágicos que comen".

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