Ahorrar en la factura, darle un aire fresco a la vivienda de toda la vida…Una reforma ofrece mil posibilidades al usuario, puesto que le permite modificar un inmueble a su antojo para conseguir su objetivo. No obstante, para poder llevar a cabo este proyecto se necesita financiación, pero… ¿Qué opciones existen?

Ahorros personales

Lo primero en lo que puede pensar una persona es en pagarlo con sus ahorros, algo que dependiendo del importe de la obra puede resultar complicado a corto plazo. Al fin y al cabo, si lo que se quiere es reformar el aislante de la casa o, incluso, cambiarla de arriba abajo se necesitarán grandes cantidades de dinero. Es por ello que es aconsejable contemplar el tema de la financiación.

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Préstamos

Para conseguir el dinero para la reforma existe el préstamo al uso. Son muchas las entidades prestamistas e, incluso, los bancos que tienen este producto. En este caso lo más importante será comparar los plazos y los intereses que tiene cada alternativa.

Hipoteca

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Hay que tener en cuenta también que, en caso de disponer de una hipoteca, se puede ampliar el capital de esta. "Entre los ciudadanos hay un gran desconocimiento. La gente no piensa que, por ejemplo, puede meter la reforma de la vivienda en la hipoteca porque se les educa para que piensen que para reformar tienen que ahorrar", asegura Simone Colombelli, director de hipotecas de iAhorro.

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Ampliación de hipoteca

Para poder ampliar el capital de la hipoteca la entidad realizará un estudio de su cliente para saber si podrá afrontar el aumento de la cuota mensual. En caso de que ésta se eleve demasiado también puede solicitarse una ampliación del periodo de amortización, aunque, en ese caso, habría que ver cuánto aumenta el interés del préstamo en sí. En definitiva, el usuario tendrá que hablar con el banco y llegar a un consenso.

Comisión por novación

Cuando el banco de el visto bueno a la ampliación de la hipoteca se realizará una novación. Este procedimiento conlleva un coste: habrá que pagar una comisión por novación (en el caso de que se modifique el periodo de amortización), notaría, registro, gestoría y tasación. Por lo tanto, habrá que desembolsar una cantidad de dinero para poder realizar la ampliación.

¿Es mejor optar por un préstamo o ampliar la hipoteca?

Entonces… ¿Es mejor optar por un préstamo o ampliar la hipoteca? Dependerá del objetivo de la reforma, su importe y las condiciones que ofrezcan ambas vías. Para una obra pequeña puede ser más conveniente un préstamo, debido a que proporciona más flexibilidad en cuanto a cantidades de dinero se refiere y, de esta manera, se puede conseguir un interés atractivo.

Sin embargo, si lo que el usuario se ha planteado es realizar una obra de gran calado ampliar su hipoteca le saldrá más rentable. Las hipotecas cuentan con un interés más bajo que el de los préstamos, lo que le permitirá a la persona no tener que desembolsar más de lo previsto.

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Asimismo, teniendo una hipoteca vigente siempre es más conveniente tener una deuda que varias separadas, puesto que, en su conjunto, se acaban pagando más intereses. Englobarlo todo en uno puede ayudar al propietario a ahorrar dinero.

Hipotecas exclusivas para reformas

Puede ocurrir que el usuario que quiera reformar su vivienda no tenga una hipoteca vigente. En ese caso puede solicitar una financiación exclusiva para una reforma.

Santander, por ejemplo, tiene la llamada hipoteca para otras finalidades que puede servir para este tipo de proyectos. Permie solicitar hasta el 60% del valor de tasación de una vivienda libre de cargas con un periodo de amortización máximo de 15 años.

Las condiciones son más limitadas que en una hipoteca habitual, pero dependiendo del importe de la obra puede ser una opción viable. Todo dependerá de lo que salga más rentable una vez contempladas todas las opciones.