El Ejército de Tierra español desplegó recientemente una batería de misiles Hawk en el ejercicio Ramstein Legacy 22 de la OTAN celebrado en Polonia.

El segundo grupo del Regimiento de Artillería Antiaérea número 74 lideró el despliegue de una Unidad de Defensa Antiaérea (UDAA) en la localidad de Orzysz, al noroeste del país, cerca de la frontera con el óblast ruso de Kaliningrado. En esta unidad se han integrado sistemas de armas antiaéreos de diferentes países aliados.

El despliegue de la UDAA, con base principal en el acuartelamiento de El Copero en Dos Hermanas (Sevilla), se llevó a cabo por carretera con el movimiento de los elementos de mando y control, una batería de misiles Hawk y dos estaciones de transmisiones Algeciras.

Del 'OTAN no, bases fuera' a la Cumbre de Madrid y la vuelta de la amenaza rusa: los 40 años de España en la Alianza Atlántica

Mientras, por vía aérea, se proyectó el grueso del personal, incluyendo a los participantes en las células de Excon del centro de control aéreo (CRC) de Varsovia y Cracovia.

La misión de la UDAA, al mando del teniente coronel jefe del Grupo de Artillería Antiáera (GAAA) II/74 , fue integrar en el Sistema de Defensa Aéreo de la OTAN a través de su centro de operaciones (Coaaasm ) no solo la batería Hawk , sino, además, baterías de misiles polacas (SA-8, SA-6 y Poprad ) y sistema de cañones Gepard del Ejército rumano.

El ejercicio Ramstein Legacy 2022 , dirigido por Mando Aéreo Aliado (Aircom ), ha integrado medios de defensa antiaérea y antimisil de diferentes países pertenecientes a la Alianza en el Sistema de Defensa Aéreo de la OTAN con el objetivo principal comprobar la interoperabilidad del NATO Integrated Air and Missile Defence (IAMD). El ejercicio se desarrolló en Polonia y en las tres repúblicas bálticas, Lituania, Letonia y Estonia.

Actualización del sistema de los misiles

El Ejército español efectuó un reacondicionamiento -overhaul- a su sistema de misiles Hawk , en servicio desde hace medio siglo ya, dentro del proceso para extender la vida operativa de sus baterías hasta 2030.

La actualización implicó la digitalización de los componentes electrónicos de los radares de seguimiento y los lanzadores del grupo analógico para hacerlos más fiables con tecnología digital de vanguardia. Esta es una de las actuaciones puestas en marcha para prolongar la vida del sistema Hawk , pero no es la única.

Dentro de los planes para extender su servicio hasta al menos 2030, el RAAA 74 trabaja en un estudio para la sustitución a medio plazo, en torno a 2025, de los radares de exploración que utiliza actualmente el sistema por el radar Sentinel , que ya está en dotación en las Fuerzas Armadas españolas. Este salto a la versión conocida como Hawk 21 es una propuesta inicial en fase todavía inicial.