La Guardia Civil y la Policía Local de Telde, en Gran Canaria, han detenido a 42 personas e investigado a otras 6 por delitos contra la seguridad vial en una operación contra carreras ilegales de coches en la que han intervenido 40 automóviles, ha informado este domingo el instituto armado.

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La detección de que en distintas vías de Telde se organizaban dichas carreras llevó a montar una "macro operación policial" para intervenir mientras se celebraba una de ellas tras un seguimiento de tres meses a sus promotores, quienes, según se destaca la Guardia Civil, tenían un sistema de alerta para huir ante una posible presencia policial.

Un peligro público 

Además, llegaban a correr en la autopista del sur de Gran Canaria, la GC-1, en horas de la noche, ocupando todos sus carriles a la vez y obstaculizando la marcha de otros usuarios de la vía a quienes ponían en riesgo llegando a adelantarlos por la derecha y la izquierda simultáneamente, generando situaciones de gran riesgo.

Y añade que "un riesgo añadido a estas competiciones era la presencia de numeroso público" que llegaba a ocupar los carriles de incorporación a la GC-1 sin usar chaleco reflectante y hasta a cruzar en medio de la oscuridad y el tráfico para observar las carreras desde la mediana y grabarlas.

Por ello, Guardia Civil y Policía Local de Telde montaron semanas atrás un dispositivo que, con participación de más de medio centenar de agentes de unidades diversas y el empleo de drones para vigilancia aérea, "permitió identificar la composición de esta trama de carreras ilegales", que llegaban a ocupar un tramo de 6 kilómetros de longitud de la autopista, usándolo en sentido de ida y vuelta.

Además, se procedió a la detención de las citadas 42 personas y se formularon numerosas denuncias a los implicados en la competición por razones diversas, desde rectificaciones no reglamentarias de sus vehículos a posesión de drogas o conducción bajo los efectos de las mismas, especifica el escrito.

Precisando también que igualmente organizaban carreras ilegales de ciclomotores cuyos motores eran reformados para hacerlos ganar velocidad, y que llegaban a correr en ambos sentidos entre los vehículos de conductores de paso cuya vida ponían en riesgo con sus maniobras y adelantamientos.